Quiero respirar la profunda manía de adormecer
el sentido cruel que domina al placer.
La debilidad son mil uñas clavadas en mi paladar
amargando más este insomnio orbital.
Veo la desesperación
escurriendo en mis manos lágrimas de alcohol
el veneno: tu, el cansancio: yo.
Me esfumaré en el fin
donde dios hace lunas a quien sabe sufrir
y sobrevivir aun despues de morir.
Quiero soportar un segundo de llanto
para maquillar mi sonrisa fugaz,
tu despecho total.
Presos del dolor
se inflaman las venas, caigo al suelo
Y yo temblando de temor,
y en coma mis párpados.
Trágame, húndeme,
en la garganta hay un nudo,
bébeme, acuéstame, cálmame.
Despacio, volviendo al revés
hedonista es el néctar de mi pesadez
el silencio y yo, contemplándonos.
Bella durmiente, líquida, etílica
placebo ardiente, humo sentimental.
Antestesia, anestesia
duerme los daños para que no toquen nada
Anestesiame el alma
sólo duerme mi mente,
y que el corazón, casi extinto
ya no sienta nada.
Ahora seca mi llanto
vuelve insensible otra vez
el presentimiento exacto
que deja tu tacto.
Anestésiame, anestesia mi piel...
Y que no toque nada
Anestesia mi mente, sólo duerme mi piel
y que el lago donde duerme la muerte no exista.
Anestesia, anestésiame...
Que no toque nada...
Anestésiame...
el sentido cruel que domina al placer.
La debilidad son mil uñas clavadas en mi paladar
amargando más este insomnio orbital.
Veo la desesperación
escurriendo en mis manos lágrimas de alcohol
el veneno: tu, el cansancio: yo.
Me esfumaré en el fin
donde dios hace lunas a quien sabe sufrir
y sobrevivir aun despues de morir.
Quiero soportar un segundo de llanto
para maquillar mi sonrisa fugaz,
tu despecho total.
Presos del dolor
se inflaman las venas, caigo al suelo
Y yo temblando de temor,
y en coma mis párpados.
Trágame, húndeme,
en la garganta hay un nudo,
bébeme, acuéstame, cálmame.
Despacio, volviendo al revés
hedonista es el néctar de mi pesadez
el silencio y yo, contemplándonos.
Bella durmiente, líquida, etílica
placebo ardiente, humo sentimental.
Antestesia, anestesia
duerme los daños para que no toquen nada
Anestesiame el alma
sólo duerme mi mente,
y que el corazón, casi extinto
ya no sienta nada.
Ahora seca mi llanto
vuelve insensible otra vez
el presentimiento exacto
que deja tu tacto.
Anestésiame, anestesia mi piel...
Y que no toque nada
Anestesia mi mente, sólo duerme mi piel
y que el lago donde duerme la muerte no exista.
Anestesia, anestésiame...
Que no toque nada...
Anestésiame...