Tengo mi casa de teja, donde silba mucho el viento,
Tiene sus paredes huecas, maltratadas por el tiempo,
Ya se le cayó la puerta, pero ya no hay nadie adentro.
En el corral que tenia, ya no se miran becerros,
Y de aquel árbol que había, solo quedan unos leños,
Que se han convertido en ruinas, donde habitan Mis recuerdos.
En esa casa de teja, pase mis primeros años,
Y aunque existía la pobreza, fui feliz con mis Hermanos,
no conocía la tristeza, que hay en Este mundo extraño.
Ya no se oye el relinchido, del caballo garañon,
Ya tampoco hay sembradíos, con maizales y fríjol.
El arado esta vencido, y apartado en un rincón.
Ya no se ven las veredas, que yo tanto recorrí,
Las tapo muy bien la hierba, nadie pasa por ahí.
Pero lo que mas me pesa, es que yo también me fui.
Es esa casa de teja, cuantas cosas me pasaron,
Ya se ve bastante vieja, pero no se ha Derrumbado.
Si mi Dios volver me deja, La arreglare con mis manos.
Tiene sus paredes huecas, maltratadas por el tiempo,
Ya se le cayó la puerta, pero ya no hay nadie adentro.
En el corral que tenia, ya no se miran becerros,
Y de aquel árbol que había, solo quedan unos leños,
Que se han convertido en ruinas, donde habitan Mis recuerdos.
En esa casa de teja, pase mis primeros años,
Y aunque existía la pobreza, fui feliz con mis Hermanos,
no conocía la tristeza, que hay en Este mundo extraño.
Ya no se oye el relinchido, del caballo garañon,
Ya tampoco hay sembradíos, con maizales y fríjol.
El arado esta vencido, y apartado en un rincón.
Ya no se ven las veredas, que yo tanto recorrí,
Las tapo muy bien la hierba, nadie pasa por ahí.
Pero lo que mas me pesa, es que yo también me fui.
Es esa casa de teja, cuantas cosas me pasaron,
Ya se ve bastante vieja, pero no se ha Derrumbado.
Si mi Dios volver me deja, La arreglare con mis manos.