Letra: Pascual Contursi
Música: José Martínez
Año: 1914
En la puerta de un boliche
un bacán encurdelado
recordaba su pasado
que una mina amuró,
y entre los humos de caña
resurgen en su memoria
esas páginas de historia
que su corazón grabó.
Bulín que ya no te veo,
catrera que no te toco,
percanta que ya no embroco
porque con otro se fue.
Mina que fuiste el encanto
de toda la muchachada
y que por una pavada
te acoplaste a un mishé.
Qué te ha de dar ese otario
que tu viejo no te ha dado,
pa' que no falte el bullón?
¿No te acordás cuando en cana
te mandaba en cuadernitos
aquellos lindos versitos
sacados del corazón?
¿No te acordás que conmigo
te pusiste un sombrero
y aquel cinturón de cuero
que a otra mina le chaqué?
¿No te traje pa'tu santo
un par de zarzos de bute
que una noche a un farabute
del cotorro le pianté?
Y con ellos unas botas
con las cañas degamuza
y una pollera papusa
hecha de seda crepé.
¿No te acordás que te traje
aquella crema de lechuga
que hasta la última verruga
de la cara te pianté?
¿Y aquellos polvos rosados
que aumentaban tus colores...?
Recordando sus amores
el pobre bacán lloró.
Música: José Martínez
Año: 1914
En la puerta de un boliche
un bacán encurdelado
recordaba su pasado
que una mina amuró,
y entre los humos de caña
resurgen en su memoria
esas páginas de historia
que su corazón grabó.
Bulín que ya no te veo,
catrera que no te toco,
percanta que ya no embroco
porque con otro se fue.
Mina que fuiste el encanto
de toda la muchachada
y que por una pavada
te acoplaste a un mishé.
Qué te ha de dar ese otario
que tu viejo no te ha dado,
pa' que no falte el bullón?
¿No te acordás cuando en cana
te mandaba en cuadernitos
aquellos lindos versitos
sacados del corazón?
¿No te acordás que conmigo
te pusiste un sombrero
y aquel cinturón de cuero
que a otra mina le chaqué?
¿No te traje pa'tu santo
un par de zarzos de bute
que una noche a un farabute
del cotorro le pianté?
Y con ellos unas botas
con las cañas degamuza
y una pollera papusa
hecha de seda crepé.
¿No te acordás que te traje
aquella crema de lechuga
que hasta la última verruga
de la cara te pianté?
¿Y aquellos polvos rosados
que aumentaban tus colores...?
Recordando sus amores
el pobre bacán lloró.