Y bueno, pues,
un día más
que se va colando
de contrabando.
Y bueno, pues,
adiós a ayer
y cada uno
a lo que hay que hacer.
Tú, enciende el sol.
Tú, tiñe el mar,
y tú, descorre el velo
que oscurece el cielo,
y tú, ve a blanquear
la espuma y la nube,
la nieve y la lana,
y tú, conmigo a cantar la mañana.
Tú, a dibujar
el trigo y la flor.
Tú, haces de viento,
dales movimiento
y tú les das color.
Tú, amasa los montes.
Tú, al pozo a baldear
y tú, conmigo y el gallo a cantar...
Que hay que empezar
un día más.
Tire pa'lante
que empujan atrás.
Y póngase el calcetín, paloma mía,
y véngase a cocinar el nuevo día.
Todo esta listo, el agua, el sol y el barro,
pero si falta usted no habrá milagro.
Si le falta usted
a un mundo enfermo y con canas,
quién va a hacerle la cama
y quién le peinará la frente
y quién le lavará la cara.
Si falta su risa
para echarlo a andar.
Venga conmigo y el gallo a cantar.
Que hay que empezar
un día más.
Tire pa'lante
que empujan atrás.
Y póngase el calcetín, paloma mía,
y véngase a cocinar el nuevo día.
Todo esta listo, el agua, el sol y el barro,
pero si falta usted no habrá milagro.
un día más
que se va colando
de contrabando.
Y bueno, pues,
adiós a ayer
y cada uno
a lo que hay que hacer.
Tú, enciende el sol.
Tú, tiñe el mar,
y tú, descorre el velo
que oscurece el cielo,
y tú, ve a blanquear
la espuma y la nube,
la nieve y la lana,
y tú, conmigo a cantar la mañana.
Tú, a dibujar
el trigo y la flor.
Tú, haces de viento,
dales movimiento
y tú les das color.
Tú, amasa los montes.
Tú, al pozo a baldear
y tú, conmigo y el gallo a cantar...
Que hay que empezar
un día más.
Tire pa'lante
que empujan atrás.
Y póngase el calcetín, paloma mía,
y véngase a cocinar el nuevo día.
Todo esta listo, el agua, el sol y el barro,
pero si falta usted no habrá milagro.
Si le falta usted
a un mundo enfermo y con canas,
quién va a hacerle la cama
y quién le peinará la frente
y quién le lavará la cara.
Si falta su risa
para echarlo a andar.
Venga conmigo y el gallo a cantar.
Que hay que empezar
un día más.
Tire pa'lante
que empujan atrás.
Y póngase el calcetín, paloma mía,
y véngase a cocinar el nuevo día.
Todo esta listo, el agua, el sol y el barro,
pero si falta usted no habrá milagro.