La calle nunca premia, desprecia, no falles, te apremia,
Hace recias las verdades, mientras otros desesperan,
Crea cánceres sociales, bienvenidos a la selva,
Sed salvajes, supervivencia es el sistema,
Arden verdades como coches en revueltas,
Arde el odio en las entrañas, caerán muertas tus promesas,
Reza hoy tus oraciones todas juntas,
El mañana será mejor, esperanza aun no abunda,
Agujas bajo tus uñas, sangre, sudor y deudas,
Hambre, pudor y lágrimas no ajustan estas cuentas,
Lucha por tus principios, lucha por objetivos,
Lucha por seguir vivo si no te asfixia una hi-po-teca,
Tensas, vivencias, diarias, sentencian,
Ansías lealtad, aunque nunca la demuestras,
Detestas actitudes cual paja en ojo ajeno,
Resístete a creerlo, todos tenemos precio,
Nos vendemos por dinero durante 8 horas al día,
40 a la semana, demasiadas en la vida,
hándicap capitalista castiga tu existencia,
mientras otros solo sueñan con un plato en la mesa,
Niega la ansiedad que aprieta en tu garganta,
cuando cada mes acaba ascendente cual rampa,
tal sarta de farsas acaba en tu casa,
y tu amada se larga con otro con más pasta,
Te pondrán los cuernos que te dejaste currando,
los buenos van al cielo, los otros van a enterrarlos, no hay trato,
desacato autoritario sin razón ni cargo,
cargas a tu espalda, en tus manos van los clavos,
Trabaja día a día viviendo en un bucle,
solo sufre quien no opina, quien no olvida a quien le hunde,
quien su vida bien resume entre el tumulto de las urbes,
se consume entre el asfalto que puede que le sepulte.
[Estribillo]
No hay diálogo...
No hay diálogo...
No hay diálogo...
No hay diálogo...
Las verdades hablan por si solas como las mentiras,
Aquí hablar más de la cuenta significa otra paliza,
Sarna que pica irrita a tu prójimo, tu el próximo en la lista,
El odio c**mina en llagas de la rutina,
Llamas eternas que arden mientras piensas,
Dos piernas siempre cuentan, para salvar tu cabeza,
Cuantas veces cuentas con cuantos demuestran su valía,
Esta realidad sombría reina entre caos y harmonía,
Dilas, ni las olvidas, oblígate a sentirlas tal que estigmas,
Sin más movidas debidas a causas perdidas
Sin dilación, ni cábalas, acaba las opciones
Callejones sin salida en vida, no suponen más que,
Pruebas, que ponen en tu camino,
juegas con tu destino que al final c**mina en juicio,
sin sitio físico, siempre vivo en corazón de quien te quiso,
extinto en tiempo injusto pero escrito
La mala fama aviva fuegos en esta hoguera,
quema de vanidades, rondan almas en pena,
el mal toma forma con nombre y apellidos,
camina por tu calle, erguido, con tu apariencia,
No cambies de acera, Dios no existe pero juzga,
siempre apunta hacia tu nuca, busca bulla a la primera,
aprenderás lecciones aunque no te lo parezca,
aprecia cada clase, no las olvides nunca,
Cállate, cual burgués que se acomoda,
vox populi ahogada por la presión económica,
agonías sin más, sin política creíble,
cuando todo lo invencible tiene un talón de Aquiles,
Sígueme ... hasta el último suspiro
único instante nítido al final del precipicio,
donde nadie perdona, nada, nada de lo que hagas
salvará palabras que aclaman tanta ignorancia.
[Estribillo]
No hay diálogo...
No hay diálogo...
No hay diálogo...
No hay diálogo...
Hace recias las verdades, mientras otros desesperan,
Crea cánceres sociales, bienvenidos a la selva,
Sed salvajes, supervivencia es el sistema,
Arden verdades como coches en revueltas,
Arde el odio en las entrañas, caerán muertas tus promesas,
Reza hoy tus oraciones todas juntas,
El mañana será mejor, esperanza aun no abunda,
Agujas bajo tus uñas, sangre, sudor y deudas,
Hambre, pudor y lágrimas no ajustan estas cuentas,
Lucha por tus principios, lucha por objetivos,
Lucha por seguir vivo si no te asfixia una hi-po-teca,
Tensas, vivencias, diarias, sentencian,
Ansías lealtad, aunque nunca la demuestras,
Detestas actitudes cual paja en ojo ajeno,
Resístete a creerlo, todos tenemos precio,
Nos vendemos por dinero durante 8 horas al día,
40 a la semana, demasiadas en la vida,
hándicap capitalista castiga tu existencia,
mientras otros solo sueñan con un plato en la mesa,
Niega la ansiedad que aprieta en tu garganta,
cuando cada mes acaba ascendente cual rampa,
tal sarta de farsas acaba en tu casa,
y tu amada se larga con otro con más pasta,
Te pondrán los cuernos que te dejaste currando,
los buenos van al cielo, los otros van a enterrarlos, no hay trato,
desacato autoritario sin razón ni cargo,
cargas a tu espalda, en tus manos van los clavos,
Trabaja día a día viviendo en un bucle,
solo sufre quien no opina, quien no olvida a quien le hunde,
quien su vida bien resume entre el tumulto de las urbes,
se consume entre el asfalto que puede que le sepulte.
[Estribillo]
No hay diálogo...
No hay diálogo...
No hay diálogo...
No hay diálogo...
Las verdades hablan por si solas como las mentiras,
Aquí hablar más de la cuenta significa otra paliza,
Sarna que pica irrita a tu prójimo, tu el próximo en la lista,
El odio c**mina en llagas de la rutina,
Llamas eternas que arden mientras piensas,
Dos piernas siempre cuentan, para salvar tu cabeza,
Cuantas veces cuentas con cuantos demuestran su valía,
Esta realidad sombría reina entre caos y harmonía,
Dilas, ni las olvidas, oblígate a sentirlas tal que estigmas,
Sin más movidas debidas a causas perdidas
Sin dilación, ni cábalas, acaba las opciones
Callejones sin salida en vida, no suponen más que,
Pruebas, que ponen en tu camino,
juegas con tu destino que al final c**mina en juicio,
sin sitio físico, siempre vivo en corazón de quien te quiso,
extinto en tiempo injusto pero escrito
La mala fama aviva fuegos en esta hoguera,
quema de vanidades, rondan almas en pena,
el mal toma forma con nombre y apellidos,
camina por tu calle, erguido, con tu apariencia,
No cambies de acera, Dios no existe pero juzga,
siempre apunta hacia tu nuca, busca bulla a la primera,
aprenderás lecciones aunque no te lo parezca,
aprecia cada clase, no las olvides nunca,
Cállate, cual burgués que se acomoda,
vox populi ahogada por la presión económica,
agonías sin más, sin política creíble,
cuando todo lo invencible tiene un talón de Aquiles,
Sígueme ... hasta el último suspiro
único instante nítido al final del precipicio,
donde nadie perdona, nada, nada de lo que hagas
salvará palabras que aclaman tanta ignorancia.
[Estribillo]
No hay diálogo...
No hay diálogo...
No hay diálogo...
No hay diálogo...