Tampoco acierto al decir que me equivoco,
la certidumbre es la lógica del loco.
Prefiero el vértigo del error
al signo de un faro cegador
que me anuncie el peligro bajo su foco.
Y es muy probable
que si el error cierra una puerta
es para que otra quede abierta
de par en par.
Temo a la claridad que no se doblega
a pensar que por clara puede estar ciega
cuando no ve que su identidad
cobra sentido en la oscuridad
del vacío que alumbra lo que ella niega.
Este planeta no está en ninguna parte,
el Universo fugaz no tiene partes.
La muerte puede que sea vital
para que nada tenga un final
al revés del principio del que se parte.
la certidumbre es la lógica del loco.
Prefiero el vértigo del error
al signo de un faro cegador
que me anuncie el peligro bajo su foco.
Y es muy probable
que si el error cierra una puerta
es para que otra quede abierta
de par en par.
Temo a la claridad que no se doblega
a pensar que por clara puede estar ciega
cuando no ve que su identidad
cobra sentido en la oscuridad
del vacío que alumbra lo que ella niega.
Este planeta no está en ninguna parte,
el Universo fugaz no tiene partes.
La muerte puede que sea vital
para que nada tenga un final
al revés del principio del que se parte.