Mírame amor a los ojos
que mi alma sedienta de tu claridad
viene del fondo del tiempo
siguiendo la estrella que en ellos está.
Muere anhelando la hondura
serena y madura de tu intimidad.
Toda el alma mía te quiero entregar
en una mirada profunda y astral.
Quemarme en la hoguera de tu corazón
y, de sangre en sangre,
fecundar la muerte.
Fecundar la muerte con nuestra canción.
Cuando te miro a los ojos
me ofrece tu boca la entrega total,
siento que un río de tigres
me cimbra las venas, oscuro y sensual,
seca tu piel indefensa
igual que la tierra tendida se va.
Toda el alma mía te quiero entregar
en una mirada profunda y astral.
Quemarme en la hoguera de tu corazón
y, de sangre en sangre,
fecundar la muerte.
Fecundar la muerte con una canción.
que mi alma sedienta de tu claridad
viene del fondo del tiempo
siguiendo la estrella que en ellos está.
Muere anhelando la hondura
serena y madura de tu intimidad.
Toda el alma mía te quiero entregar
en una mirada profunda y astral.
Quemarme en la hoguera de tu corazón
y, de sangre en sangre,
fecundar la muerte.
Fecundar la muerte con nuestra canción.
Cuando te miro a los ojos
me ofrece tu boca la entrega total,
siento que un río de tigres
me cimbra las venas, oscuro y sensual,
seca tu piel indefensa
igual que la tierra tendida se va.
Toda el alma mía te quiero entregar
en una mirada profunda y astral.
Quemarme en la hoguera de tu corazón
y, de sangre en sangre,
fecundar la muerte.
Fecundar la muerte con una canción.