María, de mi guitarra embarazada de armonía
brotó a la luz aquel poema que pretendía
que pretendía describir
lo que sentía por ti, lo que sentía María
María, de serenata te vestí día con día
para llenarte el corazón de melodías
si anochecía, me sonreías, si anochecía, María
María, si no entendieras mi pasión podría,
podría gritarle al sol que me moría, María, María,
María cuando deshojes blancas margaritas
debes pensar que mienten las que no te digan
que te amo, María
María, como he de hablarte de aquel fuego que aún de niña
sin darte cuenta mis ensueños envolvía
como añorando tu compañía, tu compañía, María
María, si me mirabas como un libro me leías
si me ignorabas, era sal sobre una herida
que me mataba, me enloquecía, me enloquecía, María
María, si no entendieras mi pasión podría,
podría gritarle al sol que me moría, María, María,
María, cuando deshojes blancas margaritas
debes pensar que mienten las que no te digan
que te amo, María, María
María, cuando deshojes blancas margaritas
debes pensar que mienten las que no te digan
que te amo, María, María
brotó a la luz aquel poema que pretendía
que pretendía describir
lo que sentía por ti, lo que sentía María
María, de serenata te vestí día con día
para llenarte el corazón de melodías
si anochecía, me sonreías, si anochecía, María
María, si no entendieras mi pasión podría,
podría gritarle al sol que me moría, María, María,
María cuando deshojes blancas margaritas
debes pensar que mienten las que no te digan
que te amo, María
María, como he de hablarte de aquel fuego que aún de niña
sin darte cuenta mis ensueños envolvía
como añorando tu compañía, tu compañía, María
María, si me mirabas como un libro me leías
si me ignorabas, era sal sobre una herida
que me mataba, me enloquecía, me enloquecía, María
María, si no entendieras mi pasión podría,
podría gritarle al sol que me moría, María, María,
María, cuando deshojes blancas margaritas
debes pensar que mienten las que no te digan
que te amo, María, María
María, cuando deshojes blancas margaritas
debes pensar que mienten las que no te digan
que te amo, María, María