en las suelas desgastadas
la paciencia de tus años,
y los puños bien marcados
por las puertas que golpeabas
no hubo tempestad que pare
la tormenta de tu alma,
somos parte de tu sombra
de tu llanto que nos llama.
sos el fuego que no pueden apagar
sos la vida en la tierra que murio
sos los ojos cuando no nos dejan ver
sos para que sigamos siendo
mil y un caras monocromas
se desangran en las horas
no hay descanso en la ausencia
no hubo hostilidad mas nuestra
y tu voz, fue mas fuerte que el dolor,
y tu voz..
y tu voz, fue mas fuerte que el dolor,
y tu voz..
sos el fuego que no pueden apagar,
sos la vida en la tierra que murio,
sos los ojos cuando no nos dejan ver,
sos para que sigamos siendo
sos el fuego que no pueden apagar,
sos la vida en la tierra que murio,
sos los ojos cuando no nos dejan ver,
sos para que sigamos siendo
para que sigamos existiendo
la paciencia de tus años,
y los puños bien marcados
por las puertas que golpeabas
no hubo tempestad que pare
la tormenta de tu alma,
somos parte de tu sombra
de tu llanto que nos llama.
sos el fuego que no pueden apagar
sos la vida en la tierra que murio
sos los ojos cuando no nos dejan ver
sos para que sigamos siendo
mil y un caras monocromas
se desangran en las horas
no hay descanso en la ausencia
no hubo hostilidad mas nuestra
y tu voz, fue mas fuerte que el dolor,
y tu voz..
y tu voz, fue mas fuerte que el dolor,
y tu voz..
sos el fuego que no pueden apagar,
sos la vida en la tierra que murio,
sos los ojos cuando no nos dejan ver,
sos para que sigamos siendo
sos el fuego que no pueden apagar,
sos la vida en la tierra que murio,
sos los ojos cuando no nos dejan ver,
sos para que sigamos siendo
para que sigamos existiendo