Ya no respiraba en la cruz
y un soldado se le acercó
" Que baje a salvarte tu dios,
que yo tengo a mi propio señor".
Alzó su mortal estandarte
y ahondó con su hierro a Jesús,
la sangre de Cristo brotó
y la lanza en reliquia erigió.
Desde entonces fue la obsesión
de todo rey y emperador
poseerla sería la gloria,
invencible ante el mundo y ser Dios.
Su leyenda creció
a lo largo del tiempo,
muchos fueron los hombres
que un día quisieron probar su poder.
En tu filo forjaste el destino de la humanidad.
Fuiste bañada en la sangre de cristo,
por ti matarán.
Puede que alguien
te quiera volver a aclamar
el tiempo nos lo dirá.
Durante siglos pasaste
de mano en mano
como la falsa moneda.
Fuiste fiel a Carlomagno,
a Napoleón ayudaste
a alzarse emperador.
Desde entonces fue la obsesión
de todo rey y emperador
poseerla sería la gloria,
invencible ante el mundo y ser Dios.
En tu filo forjaste el destino de la humanidad.
Fuiste bañada en la sangre de cristo,
por ti matarán.
Puede que alguien te quiera volver a aclamar,
el tiempo nos lo dirá.
Al fin la dejaron dormir
y la lanza en silencio esperó.
Un día Polonia tembló
y en las manos del odio se alzó.
Que rece quien sepa rezar
que la lanza aún nos puede llevar
a nuestra total destrucción
si algún loco la va a despertar.
Desde siempre fue la obsesión
de todo rey y emperador
poseerla sería la gloria,
invencible ante el mundo y ser Dios.
y un soldado se le acercó
" Que baje a salvarte tu dios,
que yo tengo a mi propio señor".
Alzó su mortal estandarte
y ahondó con su hierro a Jesús,
la sangre de Cristo brotó
y la lanza en reliquia erigió.
Desde entonces fue la obsesión
de todo rey y emperador
poseerla sería la gloria,
invencible ante el mundo y ser Dios.
Su leyenda creció
a lo largo del tiempo,
muchos fueron los hombres
que un día quisieron probar su poder.
En tu filo forjaste el destino de la humanidad.
Fuiste bañada en la sangre de cristo,
por ti matarán.
Puede que alguien
te quiera volver a aclamar
el tiempo nos lo dirá.
Durante siglos pasaste
de mano en mano
como la falsa moneda.
Fuiste fiel a Carlomagno,
a Napoleón ayudaste
a alzarse emperador.
Desde entonces fue la obsesión
de todo rey y emperador
poseerla sería la gloria,
invencible ante el mundo y ser Dios.
En tu filo forjaste el destino de la humanidad.
Fuiste bañada en la sangre de cristo,
por ti matarán.
Puede que alguien te quiera volver a aclamar,
el tiempo nos lo dirá.
Al fin la dejaron dormir
y la lanza en silencio esperó.
Un día Polonia tembló
y en las manos del odio se alzó.
Que rece quien sepa rezar
que la lanza aún nos puede llevar
a nuestra total destrucción
si algún loco la va a despertar.
Desde siempre fue la obsesión
de todo rey y emperador
poseerla sería la gloria,
invencible ante el mundo y ser Dios.