Rodríguez "El Pelirrojo" hacía pellas de religión,
vio la máquina en el bar y no aguantó la tentación.
Pero al tirar de la palanca una trampilla se abrió bajo sus pies
y al fondo cien cocodrilos cantaron con ávidez.
El que algo quiere, algo le cuesta.
No esperes que caiga el maná mientras duermes la siesta.
Juanita "La Divorciada" con su tetrabrick de Don Simón
vio la máquina en el bar y no aguantó la tentación,
pero en lugar de frutas consiguió alinear tres calaveras
y una mano inocente la empujó por las escaleras.
El que algo quiere, algo le cuesta.
No esperes que caiga el maná mientras duermes la siesta.
Don Jacinto "El Pensionista", jugador por vocación,
vio la máquina en el bar y no aguantó la tentación,
pero, al meter los dedos para recoger la calderilla,
un yunque cayó del techo y lo convirtió en esterilla.
El que algo quiere, algo le cuesta.
No esperes que caiga el maná mientras duermes la siesta.
Y eran casi las doce cuando apareció el enterrador,
cargó los bultos en el coche y recogió la recaudación,
y se tomó un zumo Vida a la salud de los difuntos,
la estupidez humana había ganado por puntos, y es que ...
El que algo quiere, algo le cuesta,
el que algo quiere, algo le cuesta,
el que algo quiere, algo le cuesta,
el que algo quiere, algo le cuesta.
Y con esto que estoy contando no prentendo que usted ahorre,
pero no me haga el papelón para que otro se forre.
Que si es duro subir, mucho más dura es la caída,
para qué vas a sufrir con lo bonita que es la vida.
El que algo quiere, algo le cuesta,
el que algo quiere, algo le cuesta.
Gasta tu dinero en botellas de buen vino,
chuletitas de cordero y este disco que es divino.
Y que suenen las guitarras, s**o, droga y rock'n'roll,
desodorante de barra, que el de spray nos mata el sol.
El que algo quiere, algo le cuesta,
el que algo quiere, algo le cuesta,
el que algo quiere, algo le cuesta,
el que algo quiere, algo le cuesta ...
vio la máquina en el bar y no aguantó la tentación.
Pero al tirar de la palanca una trampilla se abrió bajo sus pies
y al fondo cien cocodrilos cantaron con ávidez.
El que algo quiere, algo le cuesta.
No esperes que caiga el maná mientras duermes la siesta.
Juanita "La Divorciada" con su tetrabrick de Don Simón
vio la máquina en el bar y no aguantó la tentación,
pero en lugar de frutas consiguió alinear tres calaveras
y una mano inocente la empujó por las escaleras.
El que algo quiere, algo le cuesta.
No esperes que caiga el maná mientras duermes la siesta.
Don Jacinto "El Pensionista", jugador por vocación,
vio la máquina en el bar y no aguantó la tentación,
pero, al meter los dedos para recoger la calderilla,
un yunque cayó del techo y lo convirtió en esterilla.
El que algo quiere, algo le cuesta.
No esperes que caiga el maná mientras duermes la siesta.
Y eran casi las doce cuando apareció el enterrador,
cargó los bultos en el coche y recogió la recaudación,
y se tomó un zumo Vida a la salud de los difuntos,
la estupidez humana había ganado por puntos, y es que ...
El que algo quiere, algo le cuesta,
el que algo quiere, algo le cuesta,
el que algo quiere, algo le cuesta,
el que algo quiere, algo le cuesta.
Y con esto que estoy contando no prentendo que usted ahorre,
pero no me haga el papelón para que otro se forre.
Que si es duro subir, mucho más dura es la caída,
para qué vas a sufrir con lo bonita que es la vida.
El que algo quiere, algo le cuesta,
el que algo quiere, algo le cuesta.
Gasta tu dinero en botellas de buen vino,
chuletitas de cordero y este disco que es divino.
Y que suenen las guitarras, s**o, droga y rock'n'roll,
desodorante de barra, que el de spray nos mata el sol.
El que algo quiere, algo le cuesta,
el que algo quiere, algo le cuesta,
el que algo quiere, algo le cuesta,
el que algo quiere, algo le cuesta ...