Al pie del ciprés, leyendo un mal libro que dejó olvidado,
ebrio, echado al sol, pensaba en su gato y se sonreía.
Al paso del castor que va río arriba, él retuvo el aire,
frágil es la paz del hijo del hombre, aquel que Dios ha hecho.
ebrio, echado al sol, pensaba en su gato y se sonreía.
Al paso del castor que va río arriba, él retuvo el aire,
frágil es la paz del hijo del hombre, aquel que Dios ha hecho.