Le marcaron un camino
que no supo recorrer.
Le mostraron los peligros
y a los que debía temer.
Por siempre fue la oveja
negra que escapó del redil
se perdió entre la maleza
por ser algo más
confundió las apariencias
de su propio Dios
rebosando entre sus venas
un dulce amargor
Gastó la vida que ella regaló
Jugando a ser mayor, se hizo viejo sin querer
Tan solo hay un minuto
Puntuará la cuenta atrás
O tan solo ese minuto
De sangre fresca tiñe el día
que dejó de padecer
Y esa madre junto al hijo
ya dejó de sufrir
Las campanas del olvido
redoblan por él
Gastó la vida que ella regaló
Jugando a ser mayor, se hizo viejo sin querer
Gastó saliva para replicar
palabras que no llegarán a ver
la claridad
Y del mundo que ella construyó
ni a base de fuerza y valor escapa
por la ventana
[solo]
Jugando a ser mayor, se hizo viejo sin querer...
Gastó saliva para replicar
palabras que no llegarán a ver
la claridad
Y del mundo que ella construyó
ni a base de fuerza y valor escapa
por la ventana
que no supo recorrer.
Le mostraron los peligros
y a los que debía temer.
Por siempre fue la oveja
negra que escapó del redil
se perdió entre la maleza
por ser algo más
confundió las apariencias
de su propio Dios
rebosando entre sus venas
un dulce amargor
Gastó la vida que ella regaló
Jugando a ser mayor, se hizo viejo sin querer
Tan solo hay un minuto
Puntuará la cuenta atrás
O tan solo ese minuto
De sangre fresca tiñe el día
que dejó de padecer
Y esa madre junto al hijo
ya dejó de sufrir
Las campanas del olvido
redoblan por él
Gastó la vida que ella regaló
Jugando a ser mayor, se hizo viejo sin querer
Gastó saliva para replicar
palabras que no llegarán a ver
la claridad
Y del mundo que ella construyó
ni a base de fuerza y valor escapa
por la ventana
[solo]
Jugando a ser mayor, se hizo viejo sin querer...
Gastó saliva para replicar
palabras que no llegarán a ver
la claridad
Y del mundo que ella construyó
ni a base de fuerza y valor escapa
por la ventana