Cuando ella dice sí se entregan los soldados,
se paran las agujas del reloj,
se despereza el sol.
Cuando ella dice sí se aleja el invierno
se atreven las sirenas a cantar,
los trenes a esperar.
Cuando ella dice sí no asusta la tormenta,
las calles recuperan la razón,
el mundo el porvenir.
(estribillo)
Y ya no lloverá más soledad,
en sus ojos está la vida al despertar.
Las bocas se entienden, las estrellas prenden
trepando al cielo de Babel,
ella me da abrigo y paz.
Hay lunas que alumbran las noches oscuras
que pierdo el sueño y la fe,
ella me da abrigo y paz.
Cuando ella dice sí callan los terremotos,
se duermen los dragones a mis pies,
no importa envejecer.
(estribillo)
Cuando ella dice sí...
se paran las agujas del reloj,
se despereza el sol.
Cuando ella dice sí se aleja el invierno
se atreven las sirenas a cantar,
los trenes a esperar.
Cuando ella dice sí no asusta la tormenta,
las calles recuperan la razón,
el mundo el porvenir.
(estribillo)
Y ya no lloverá más soledad,
en sus ojos está la vida al despertar.
Las bocas se entienden, las estrellas prenden
trepando al cielo de Babel,
ella me da abrigo y paz.
Hay lunas que alumbran las noches oscuras
que pierdo el sueño y la fe,
ella me da abrigo y paz.
Cuando ella dice sí callan los terremotos,
se duermen los dragones a mis pies,
no importa envejecer.
(estribillo)
Cuando ella dice sí...