Hondo y sentido como el cante y como el vino
con razón y algo de suerte,
haces el camino por el lado más ladino
sin que siente precedente.
Vas de la mano de la verdad vencida,
son las secuelas de que la vida estira.
Terco, redomado, retorcido, envenenado
y convencido hasta la muerte.
Riges por el código animal y con espíritu racial
no hay mas que verte.
Vas de la mano de la verdad vencida,
son las secuelas de que la vida estira.
Vas de la mano de la verdad vencida.
Impenitente, tardo y anodino,
ya ni sabes detenerte.
Sigues ofuscado con que todo está acabado
y no lo ves continuamente.
Vas de la mano de la verdad vencida,
son las secuelas de que la vida estira.
Tómate un relajo y mándalo todo al carajo que
al final es lo prudente.
Mísero doliente de quimeras a destajo
y deja que pase el siguiente.
Vas de la mano de la verdad vencida,
son las secuelas de que la vida estira.
Vas de la mano de la verdad vencida.
con razón y algo de suerte,
haces el camino por el lado más ladino
sin que siente precedente.
Vas de la mano de la verdad vencida,
son las secuelas de que la vida estira.
Terco, redomado, retorcido, envenenado
y convencido hasta la muerte.
Riges por el código animal y con espíritu racial
no hay mas que verte.
Vas de la mano de la verdad vencida,
son las secuelas de que la vida estira.
Vas de la mano de la verdad vencida.
Impenitente, tardo y anodino,
ya ni sabes detenerte.
Sigues ofuscado con que todo está acabado
y no lo ves continuamente.
Vas de la mano de la verdad vencida,
son las secuelas de que la vida estira.
Tómate un relajo y mándalo todo al carajo que
al final es lo prudente.
Mísero doliente de quimeras a destajo
y deja que pase el siguiente.
Vas de la mano de la verdad vencida,
son las secuelas de que la vida estira.
Vas de la mano de la verdad vencida.