En un país lejano
dos razas con honor
luchan por unas tierras
sin razón.
Pretenden difundir
la rabia y el dolor
sembrando la injusticia
y la agonía.
A unas personas que no entienden la injusticia
de que ellos tengan que luchar...
Dejarse la piel
Cañones y fusiles
son su canción de paz,
ríos de sangre en llamas
siempre vivos.
Tonos grises oscuros
envuelven la ciudad
sobre un manto de sueños
y avaricia.
Por unas tierras que no tienen más riqueza
que el egoísmo, el lucro y hambre que pasar.
Algunas veces lloran sangre,
y otras tantas muerte dan.
Con sangre y muerte,
tan sólo con ríos de sangre consiguen limpiar su honor.
Con sangre y muerte;
imponiendo su propia ley.
Pero ellos son diferentes,
empuñan la verdad,
sólo son servidores de su dios.
No existen las batallas
en las que reine el mal;
los niños sólo juegan a matar.
Con sangre y muerte,
siguen soñando en el día que llegue su salvación
Con sangre y muerte;
imponiendo su propia ley
Cuantas más naciones
luchen por la paz,
más fuerza tendremos
para atacar.
Cuantas más promesas
puedan realizar,
más puertas sinceras
se nos abrirán.
dos razas con honor
luchan por unas tierras
sin razón.
Pretenden difundir
la rabia y el dolor
sembrando la injusticia
y la agonía.
A unas personas que no entienden la injusticia
de que ellos tengan que luchar...
Dejarse la piel
Cañones y fusiles
son su canción de paz,
ríos de sangre en llamas
siempre vivos.
Tonos grises oscuros
envuelven la ciudad
sobre un manto de sueños
y avaricia.
Por unas tierras que no tienen más riqueza
que el egoísmo, el lucro y hambre que pasar.
Algunas veces lloran sangre,
y otras tantas muerte dan.
Con sangre y muerte,
tan sólo con ríos de sangre consiguen limpiar su honor.
Con sangre y muerte;
imponiendo su propia ley.
Pero ellos son diferentes,
empuñan la verdad,
sólo son servidores de su dios.
No existen las batallas
en las que reine el mal;
los niños sólo juegan a matar.
Con sangre y muerte,
siguen soñando en el día que llegue su salvación
Con sangre y muerte;
imponiendo su propia ley
Cuantas más naciones
luchen por la paz,
más fuerza tendremos
para atacar.
Cuantas más promesas
puedan realizar,
más puertas sinceras
se nos abrirán.