Dame la arena y el olear de tus caderas,
sobre la playa donde solo el mar, nos ve,
para que el brillo del naranja quede quieto,
entre el dibujo de mi beso en tu lunar.
Muchacha bella que alborota mi locura,
y me desprende hacia las calles de su amor,
y ahí reposo entre sus labios mis secretos,
el pañuelo y las canciones
que al quererla le escribí.
No te me pierdas en los miedos que da el aire,
pues si te pierdes se me pierde el corazón,
quédate cerca del calor que da mi abrazo,
para fundirnos entre el humo y la pasión,
muchacha de arenas de italianas playas,
muchacha de arenas de italianas playas.
Como serpiente cruzaré tus altos valles,
tus cortos ríos, cicatrices y el jardín,
para besar la perla blanca encantadora,
que te colocas los domingos al salir.
Muchacha bella que alborota mi locura,
y me desprende hacia las calles de su amor,
allí reposo entre sus labios mis secretos,
el pañuelo y las canciones que al quererla le escribí.
No te me pierdas en los miedos que da el aire,
pues si te pierdes se me pierde el corazón...
No te me pierdas en los miedos que da el aire,
pues si te pierdes se me pierde el corazón,
deja que caigan suavemente los misterios
y por tu boca muera el pez y muera yo,
muchacha de arenas de italianas playas...
Y por tu boca muera el pez y muera yo,
muchacha de arenas de italianas playas...
sobre la playa donde solo el mar, nos ve,
para que el brillo del naranja quede quieto,
entre el dibujo de mi beso en tu lunar.
Muchacha bella que alborota mi locura,
y me desprende hacia las calles de su amor,
y ahí reposo entre sus labios mis secretos,
el pañuelo y las canciones
que al quererla le escribí.
No te me pierdas en los miedos que da el aire,
pues si te pierdes se me pierde el corazón,
quédate cerca del calor que da mi abrazo,
para fundirnos entre el humo y la pasión,
muchacha de arenas de italianas playas,
muchacha de arenas de italianas playas.
Como serpiente cruzaré tus altos valles,
tus cortos ríos, cicatrices y el jardín,
para besar la perla blanca encantadora,
que te colocas los domingos al salir.
Muchacha bella que alborota mi locura,
y me desprende hacia las calles de su amor,
allí reposo entre sus labios mis secretos,
el pañuelo y las canciones que al quererla le escribí.
No te me pierdas en los miedos que da el aire,
pues si te pierdes se me pierde el corazón...
No te me pierdas en los miedos que da el aire,
pues si te pierdes se me pierde el corazón,
deja que caigan suavemente los misterios
y por tu boca muera el pez y muera yo,
muchacha de arenas de italianas playas...
Y por tu boca muera el pez y muera yo,
muchacha de arenas de italianas playas...