Sus ojos como dos retrovisores reflejando solo lo que queda atrás.
Los míos como un volante hacia un lugar que nunca verás.
El atardecer fue una frontera como Corea del Norte
Pero con sus nubes de metal sus barreras corté.
Lo que después vino es un secreto a voces.
Creo que no lo se ni yo pero mis canciones lo conocen.
No se si has estado colocado pensando en saltar por la ventana.
Gritando a la ciudad mientras la palabra te negaba.
Viéndolo todo como una pesadilla absurda
Anhelando que en vez de polvo de diablo te aturda una v****.
Los árboles parecían ser termómetros estallando
Cuando la noche helada arrasaba los iglús de mis manos.
Ví a Jim Morrison bailando en mi balcón
Le dije que sus poemas eran una mierda y su lagarto me cazó.
Mi puto cuchillo encallado en cualquier tronco
Como pa cortar las ramas por las que me andaba
Lamiendo su resina con la mirada perdida y loco
Haciéndome cosquillas en la polla con raíces envenenadas.
Ella hacía salir el sol a su antojo
Y los rayos secaron su humedad aunque yo siempre me mojo.
Ponía velas en los rincones más sombríos de mi paciencia.
Y con la cera taponaba mis oídos cuando me decía
" Voy a irme tarde o temprano pa jamás volver"
Comerle el coño y autoflagelarme hubiera sido lo menos soez.
El misterio monopolizando cualquier tipo de pensamiento.
Me cansé de vivir rápido, quisiera follarla lento.
Estoy lejos de casa pero no me importa donde
Tampoco vendrá a buscarme a la estación cuando regrese.
Y el horizonte otra vez entre bloques se esconde.
Como si bloquear mis divagaciones diera morbo a sus intereses.
Siempre me fijé más en las abejas que en la miel.
Ahora mi amada tristeza me deja que le sea infiel.
Si tuviera mucha pasta donaría la mayoría
Pero el resto gastado en vicios me mataría.
Ella corre por los tejados ajena a las cartas
Que escribí en las chimeneas, pero su subconsciente canta
Alguna de las canciones que le dediqué en trance.
Y pa que la desesperación no me alcance le pintaré un poema en el garaje.
Ella mi musa escurridiza. Me cuesta creerlo.
Cuando un día pintó el oxidado cielo y fue carne en mi polvo y ceniza.
Algo el bello me eriza cuando ya no tengo fuerzas.
Y mi nave aterriza donde otro plano astral empieza.
Yo le dí mi virginidad y no fue la primera a quien se la metí.
Fue mi primer amor sin ser la primera a quien amé.
Era la gata negra que me traía buena suerte.
En el tatuaje de mi subconsciente pone "no se si volveré a verte"
Los gusanos están correteando entre nuestros pies
Forman espejismos rosados pero yo aún muestro lo que es
El colmo de la negrura. Y así me como torturas.
Por plantar cara a el olvido y su puta dictadura.
Los míos como un volante hacia un lugar que nunca verás.
El atardecer fue una frontera como Corea del Norte
Pero con sus nubes de metal sus barreras corté.
Lo que después vino es un secreto a voces.
Creo que no lo se ni yo pero mis canciones lo conocen.
No se si has estado colocado pensando en saltar por la ventana.
Gritando a la ciudad mientras la palabra te negaba.
Viéndolo todo como una pesadilla absurda
Anhelando que en vez de polvo de diablo te aturda una v****.
Los árboles parecían ser termómetros estallando
Cuando la noche helada arrasaba los iglús de mis manos.
Ví a Jim Morrison bailando en mi balcón
Le dije que sus poemas eran una mierda y su lagarto me cazó.
Mi puto cuchillo encallado en cualquier tronco
Como pa cortar las ramas por las que me andaba
Lamiendo su resina con la mirada perdida y loco
Haciéndome cosquillas en la polla con raíces envenenadas.
Ella hacía salir el sol a su antojo
Y los rayos secaron su humedad aunque yo siempre me mojo.
Ponía velas en los rincones más sombríos de mi paciencia.
Y con la cera taponaba mis oídos cuando me decía
" Voy a irme tarde o temprano pa jamás volver"
Comerle el coño y autoflagelarme hubiera sido lo menos soez.
El misterio monopolizando cualquier tipo de pensamiento.
Me cansé de vivir rápido, quisiera follarla lento.
Estoy lejos de casa pero no me importa donde
Tampoco vendrá a buscarme a la estación cuando regrese.
Y el horizonte otra vez entre bloques se esconde.
Como si bloquear mis divagaciones diera morbo a sus intereses.
Siempre me fijé más en las abejas que en la miel.
Ahora mi amada tristeza me deja que le sea infiel.
Si tuviera mucha pasta donaría la mayoría
Pero el resto gastado en vicios me mataría.
Ella corre por los tejados ajena a las cartas
Que escribí en las chimeneas, pero su subconsciente canta
Alguna de las canciones que le dediqué en trance.
Y pa que la desesperación no me alcance le pintaré un poema en el garaje.
Ella mi musa escurridiza. Me cuesta creerlo.
Cuando un día pintó el oxidado cielo y fue carne en mi polvo y ceniza.
Algo el bello me eriza cuando ya no tengo fuerzas.
Y mi nave aterriza donde otro plano astral empieza.
Yo le dí mi virginidad y no fue la primera a quien se la metí.
Fue mi primer amor sin ser la primera a quien amé.
Era la gata negra que me traía buena suerte.
En el tatuaje de mi subconsciente pone "no se si volveré a verte"
Los gusanos están correteando entre nuestros pies
Forman espejismos rosados pero yo aún muestro lo que es
El colmo de la negrura. Y así me como torturas.
Por plantar cara a el olvido y su puta dictadura.