Juraste defender los intereses de tu pueblo
firmando con el rico un seguro a todo riesgo.
Todo eran mentiras, todo eran engaños,
hiciste a la fuerza, de los pobres tus esclavos.
Vendiste tu país por puro egoísmo
comprando armamento para estar a las alturas.
Te gustó codearte con los más ricos países,
llevando tras la espalda a la reina de las miserias,
la más rica miseria
Mientras el pueblo muere,
mientras el pueblo muere por tu propio fascismo.
Algún día serás el que suplicarás,
te has cruzado de cara con la muerte,
tu propio pueblo será el que al fin vengará
a los espíritus que tú incineraste,
que tú incineraste.
Huye!
es la semilla que tú sembraste,
huye!
que malos frutos que van a darte,
huye!
es la semilla que tú sembraste,
huye!
y ahora ya nadie está de tu parte.
Son jóvenes y llenos de coraje,
es la guerrilla que está de nuestra parte.
Ahora ya nada puedes hacer
tienes que joderte, te van a joder,
te van a joder.
Huye!
es la semilla que tú sembraste,
huye!
que malos frutos que van a darte,
huye!
es la semilla que tú sembraste,
huye!
y ahora ya nadie está de tu parte.
Eres el verdugo, eres el verdugo,
eres el verdugo de tu propia muerte.
firmando con el rico un seguro a todo riesgo.
Todo eran mentiras, todo eran engaños,
hiciste a la fuerza, de los pobres tus esclavos.
Vendiste tu país por puro egoísmo
comprando armamento para estar a las alturas.
Te gustó codearte con los más ricos países,
llevando tras la espalda a la reina de las miserias,
la más rica miseria
Mientras el pueblo muere,
mientras el pueblo muere por tu propio fascismo.
Algún día serás el que suplicarás,
te has cruzado de cara con la muerte,
tu propio pueblo será el que al fin vengará
a los espíritus que tú incineraste,
que tú incineraste.
Huye!
es la semilla que tú sembraste,
huye!
que malos frutos que van a darte,
huye!
es la semilla que tú sembraste,
huye!
y ahora ya nadie está de tu parte.
Son jóvenes y llenos de coraje,
es la guerrilla que está de nuestra parte.
Ahora ya nada puedes hacer
tienes que joderte, te van a joder,
te van a joder.
Huye!
es la semilla que tú sembraste,
huye!
que malos frutos que van a darte,
huye!
es la semilla que tú sembraste,
huye!
y ahora ya nadie está de tu parte.
Eres el verdugo, eres el verdugo,
eres el verdugo de tu propia muerte.