Sale loco de contento
Con su cargamento
Para la ciudad, ay,
Para la ciudad.
Lleva en su pensamiento
Todo un mundo lleno
De felicidad, ay,
De felicidad.
Piensa remediar la situación
Del hogar que es toda su ilusión, si.
Y alegre el jibarito vá
Pensando así, diciendo así,
Cantando así por el camino
Si yo vendo la carga, mi Dios Querido
Un traje a mi viejita voy a comprar.
Y alegre también su yegua vá
Al presentir
Que aquel cantar
Es todo un himno de alegría.
Y en eso le sorprende la luz del dia
Y llegan al mercado de la ciudad.
Pasa la mañana entera
Sin que nadie quiera
Su carga comprar,
Su carga comprar.
Todo, todo está desierto,
Y el pueblo está muerto
De necesidad, de necesidad.
Se oye este lamento por doquier,
De mi desdichada Borinquen, si;
Y triste, el, jibarito vá
pensando así, diciendo así
Llorando así por el camino;
¡Que será de Borinquen
Mi Dios querido!
¡Que será de his hijos
Y de mi hogar!
Borinquen, la tierra del edén
La que al cantar, el gran Gautier
Llamó la perla de los mares.
Ahora que tu te mueres
Con tus pesares
Déjame que te cante yo tambien.
Yo también.
Con su cargamento
Para la ciudad, ay,
Para la ciudad.
Lleva en su pensamiento
Todo un mundo lleno
De felicidad, ay,
De felicidad.
Piensa remediar la situación
Del hogar que es toda su ilusión, si.
Y alegre el jibarito vá
Pensando así, diciendo así,
Cantando así por el camino
Si yo vendo la carga, mi Dios Querido
Un traje a mi viejita voy a comprar.
Y alegre también su yegua vá
Al presentir
Que aquel cantar
Es todo un himno de alegría.
Y en eso le sorprende la luz del dia
Y llegan al mercado de la ciudad.
Pasa la mañana entera
Sin que nadie quiera
Su carga comprar,
Su carga comprar.
Todo, todo está desierto,
Y el pueblo está muerto
De necesidad, de necesidad.
Se oye este lamento por doquier,
De mi desdichada Borinquen, si;
Y triste, el, jibarito vá
pensando así, diciendo así
Llorando así por el camino;
¡Que será de Borinquen
Mi Dios querido!
¡Que será de his hijos
Y de mi hogar!
Borinquen, la tierra del edén
La que al cantar, el gran Gautier
Llamó la perla de los mares.
Ahora que tu te mueres
Con tus pesares
Déjame que te cante yo tambien.
Yo también.