Detrás de esta guitarra hay un tipo
lleno de complejos,
un tipo que no escapa a las leyes
de nuestro universo,
pegado a la tierra, urgente de besos.
Está la soledad, la compañía fiel,
la muerte de papel, juguetes de peluche,
alguna que otra herida chorreándole mujer,
un tipo que camina
y que hasta escupe, suda, come, traga.
Detrás de esta guitarra hay un tipo
ni bueno ni malo
que cuando llueve observa con calma
su patio mojado,
pendiente de guerras, sediento de años.
Hay un poco de mar,
periódicos de ayer, un olor a café
y un violín en su estuche,
un bastón rojo y blanco, cervezas sin espuma,
un tipo que hasta tose, y que estornuda, va al baño, hace el amor.
En fin, detrás de una caja con cuerdas
hay siempre un ser humano.
lleno de complejos,
un tipo que no escapa a las leyes
de nuestro universo,
pegado a la tierra, urgente de besos.
Está la soledad, la compañía fiel,
la muerte de papel, juguetes de peluche,
alguna que otra herida chorreándole mujer,
un tipo que camina
y que hasta escupe, suda, come, traga.
Detrás de esta guitarra hay un tipo
ni bueno ni malo
que cuando llueve observa con calma
su patio mojado,
pendiente de guerras, sediento de años.
Hay un poco de mar,
periódicos de ayer, un olor a café
y un violín en su estuche,
un bastón rojo y blanco, cervezas sin espuma,
un tipo que hasta tose, y que estornuda, va al baño, hace el amor.
En fin, detrás de una caja con cuerdas
hay siempre un ser humano.