Con todas estas páginas he construido mi mansión en una zona alta de la ciudad, soleada y residencial.
Me llegó a ofrecer -y era una ganga- mano de obra infantil cierta gran multinacional.
Claro, yo la rechacé.
No saben la de cosas que se escuchan cuando tus paredes son todas de papel.
Anoche oí a dos tipos planear una guerra nuclear mientras me hacía un té.
Y a veces oigo a las ratas
que roen la pared.
Les doy papel de estraza
del que uso yo para sacar la tinta de la piel.
Y vivo así en mi palacio de papel.
Se está bien aquí, se está bien.
La mujer del tiempo anuncia un vendaval,
pero no me iré; resistiré.
Y se oyen voces que hablan de deshaucio y sé que quieren derribar mi humilde mansión.
Al parecer pretende abrir aquí una nueva boutique un tal Louis Vuitton.
Puede que lo hable con él...
O puede que me atrinchere aquí, y como cualquier animal ya sabré lo que hay que hacer.
O entienda que si no pierdo la fe es porque jamás llegué a tener una que perder.
Pero en veintiocho años,
vean que la reconstruí
con estas sucias manos
un millar de veces y sigo viviendo así,
como un rey en mi palacio de papel.
Se está bien aquí, se está bien.
La mujer del tiempo anuncia un huracán,
pero no me iré; resistiré.
Y si hay un fuego aprenderé a arder.
Y si empiezo a arder aprenderé a apagarme.
Y vivo así en mi palacio de papel...
(Tengo una razón y volveré a ACTUAR.)
(No hay IMPUNIDAD pero voy a actuar.)
Me llegó a ofrecer -y era una ganga- mano de obra infantil cierta gran multinacional.
Claro, yo la rechacé.
No saben la de cosas que se escuchan cuando tus paredes son todas de papel.
Anoche oí a dos tipos planear una guerra nuclear mientras me hacía un té.
Y a veces oigo a las ratas
que roen la pared.
Les doy papel de estraza
del que uso yo para sacar la tinta de la piel.
Y vivo así en mi palacio de papel.
Se está bien aquí, se está bien.
La mujer del tiempo anuncia un vendaval,
pero no me iré; resistiré.
Y se oyen voces que hablan de deshaucio y sé que quieren derribar mi humilde mansión.
Al parecer pretende abrir aquí una nueva boutique un tal Louis Vuitton.
Puede que lo hable con él...
O puede que me atrinchere aquí, y como cualquier animal ya sabré lo que hay que hacer.
O entienda que si no pierdo la fe es porque jamás llegué a tener una que perder.
Pero en veintiocho años,
vean que la reconstruí
con estas sucias manos
un millar de veces y sigo viviendo así,
como un rey en mi palacio de papel.
Se está bien aquí, se está bien.
La mujer del tiempo anuncia un huracán,
pero no me iré; resistiré.
Y si hay un fuego aprenderé a arder.
Y si empiezo a arder aprenderé a apagarme.
Y vivo así en mi palacio de papel...
(Tengo una razón y volveré a ACTUAR.)
(No hay IMPUNIDAD pero voy a actuar.)