Miguel Matamoros (Cuba).
Aunque tú me has dejado en el abandono,
aunque tú has muerto todas mis ilusiones,
en vez de maldecirte con justo encono,
en mis sueños te colmo,
en mis sueños te colmo de bendiciones.
Sufro la inmensa pena de tu extravío,
siento el dolor profundo de tu falsía,
y lloro sin que sepas que el llanto mío
tiene lágrimas negras,
tiene lágrimas negras como mi vida.
Tú me quieres dejar,
yo no quiero sufrir,
contigo me voy, mi santa,
aunque me cueste el morir.
Tú me quieres dejar,
yo no quiero sufrir,
mira, mulata, si me dejas,
te tendrás que arrepentir.
Yo no quiero sufrir
y tú me quieres dejar,
mira, mulata, si me dejas
yo me voy a suicidar.
---------
Entre el bolero y el son se mueve este extraordinario éxito del Trío Matamoros (es decir: Rafael Cueto, Miguel Matamoros y Ciro Rodríguez), que sigue tan campante después de casi 70 años. La profesoras Iris M. Zavala localiza su gestación entre 1925 y 1930. Viene a ser una especie de Entre Dos Aguas, de Paco de Lucía, con esa fusión de dos géneros populares que han marcado la música cubana por los siglos de los siglos. La frecuencia del tres cubano en nuestra versión es de exclusiva responsabilidad de ese gran músico venezolano Jesús El Pingüino, hoy afincado entre nosotros; a Dios, gracias. Desde hace seis años, El Pingüino no puede fallar en nuestros discos.
Aunque tú me has dejado en el abandono,
aunque tú has muerto todas mis ilusiones,
en vez de maldecirte con justo encono,
en mis sueños te colmo,
en mis sueños te colmo de bendiciones.
Sufro la inmensa pena de tu extravío,
siento el dolor profundo de tu falsía,
y lloro sin que sepas que el llanto mío
tiene lágrimas negras,
tiene lágrimas negras como mi vida.
Tú me quieres dejar,
yo no quiero sufrir,
contigo me voy, mi santa,
aunque me cueste el morir.
Tú me quieres dejar,
yo no quiero sufrir,
mira, mulata, si me dejas,
te tendrás que arrepentir.
Yo no quiero sufrir
y tú me quieres dejar,
mira, mulata, si me dejas
yo me voy a suicidar.
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Entre el bolero y el son se mueve este extraordinario éxito del Trío Matamoros (es decir: Rafael Cueto, Miguel Matamoros y Ciro Rodríguez), que sigue tan campante después de casi 70 años. La profesoras Iris M. Zavala localiza su gestación entre 1925 y 1930. Viene a ser una especie de Entre Dos Aguas, de Paco de Lucía, con esa fusión de dos géneros populares que han marcado la música cubana por los siglos de los siglos. La frecuencia del tres cubano en nuestra versión es de exclusiva responsabilidad de ese gran músico venezolano Jesús El Pingüino, hoy afincado entre nosotros; a Dios, gracias. Desde hace seis años, El Pingüino no puede fallar en nuestros discos.