Me bautizaron con el nombre de Gastón,
y aquello fue toda una premonición.
Sin el gasto compulsivo
la existencia no tiene sentido.
Polvo somos y en polvo nos convertiremos.
¿Para qué vamos a ahorrar si cada día es uno menos?
Que me quiten lo gastado,
lo pulido y lo derrochado.
Despilfarrando,
y los vecinos mientras tanto
no paran de molestar.
Tu nombre es María de la Austeridad,
No es premonición: es la cruda realidad.
Para ti somos incompatibles,
yo diría que complementarios.
Tu ahorra que te ahorra y yo gasta que te gasta:
Con eso te demuestro que eres mi media naranja.
A relajarse y a disfrutar,
porque no me vas a hacer cambiar.
Despilfarrando,
y los vecinos mientras tanto
no paran de molestar.
Despilfarrando,
y los vecinos mientras tanto
no paran de molestar.
y aquello fue toda una premonición.
Sin el gasto compulsivo
la existencia no tiene sentido.
Polvo somos y en polvo nos convertiremos.
¿Para qué vamos a ahorrar si cada día es uno menos?
Que me quiten lo gastado,
lo pulido y lo derrochado.
Despilfarrando,
y los vecinos mientras tanto
no paran de molestar.
Tu nombre es María de la Austeridad,
No es premonición: es la cruda realidad.
Para ti somos incompatibles,
yo diría que complementarios.
Tu ahorra que te ahorra y yo gasta que te gasta:
Con eso te demuestro que eres mi media naranja.
A relajarse y a disfrutar,
porque no me vas a hacer cambiar.
Despilfarrando,
y los vecinos mientras tanto
no paran de molestar.
Despilfarrando,
y los vecinos mientras tanto
no paran de molestar.