Aquí
descansó su mirada el chasqui
y quedó sereno.
Pero
el rumor del Elqui rebalsando,
le trajo recuerdos, y pensó
en chasquidos lejanos.
Y fijó la mente, y
vio con su corazón
la Cordillera Real,
y contó las piedras.
Piedras que caen desde el camino.
Piedras que construyen ansias antiguas.
Piedras ricas, preciosas, sagradas.
Piedras del camino.
Imperio mineral,
hoy pintas de colores
la Cordillera de los Andes
y escuchas al Elqui rebalsado.
Hoy,
chasqui pensativo,
rezas a tus dioses
antes de surcar la historia.
Al construir tu camino
dejaste la tierra
sembrada de reflejos,
de lunas, de estrellas.
"¡Qué voz más férrea
la de tus acantilados y quebradas!
¡Qué voz magnífica
la de tus crestas nevadas!
¡Madre Patria abrazadora,
cobijadora,
bendita es mi suerte de
recorrerte!"
Así rezó el chasqui en El Tambo.
descansó su mirada el chasqui
y quedó sereno.
Pero
el rumor del Elqui rebalsando,
le trajo recuerdos, y pensó
en chasquidos lejanos.
Y fijó la mente, y
vio con su corazón
la Cordillera Real,
y contó las piedras.
Piedras que caen desde el camino.
Piedras que construyen ansias antiguas.
Piedras ricas, preciosas, sagradas.
Piedras del camino.
Imperio mineral,
hoy pintas de colores
la Cordillera de los Andes
y escuchas al Elqui rebalsado.
Hoy,
chasqui pensativo,
rezas a tus dioses
antes de surcar la historia.
Al construir tu camino
dejaste la tierra
sembrada de reflejos,
de lunas, de estrellas.
"¡Qué voz más férrea
la de tus acantilados y quebradas!
¡Qué voz magnífica
la de tus crestas nevadas!
¡Madre Patria abrazadora,
cobijadora,
bendita es mi suerte de
recorrerte!"
Así rezó el chasqui en El Tambo.