Los niños no lloran,
los hombres no lloran,
no saben mentir, no deben llorar,
no pueden mentir.
En mis recuerdos,
los hombres son fuertes,
deben ganar, deben vencer,
no pueden perder.
Entre mis miedos,
se esconden fantasmas,
me miran, me asustan,
no son de verdad.
A veces tiemblan,
tiemblan cristales,
dentro de mí,
hay fragilidad,
algo se puede romper.
Hay, un duelo amor, odiándote.
Hay, un duelo amor, odiándote.
El niño llora,
el hombre llora,
estamos juntos,
por simple razón,
me siento otra vez.
El silencio se acaba,
me siento caliente,
es un instante,
se ha roto el cristal,
ya no hay nada más.
Hay, un duelo amor, odiándote.
Hay, un duelo amor, odiándote.
Hay, un duelo amor, odiándote.
Hay, un duelo amor, odiándote.
Hay, un duelo amor, odiándote.
Hay, un duelo amor, odiándote.
los hombres no lloran,
no saben mentir, no deben llorar,
no pueden mentir.
En mis recuerdos,
los hombres son fuertes,
deben ganar, deben vencer,
no pueden perder.
Entre mis miedos,
se esconden fantasmas,
me miran, me asustan,
no son de verdad.
A veces tiemblan,
tiemblan cristales,
dentro de mí,
hay fragilidad,
algo se puede romper.
Hay, un duelo amor, odiándote.
Hay, un duelo amor, odiándote.
El niño llora,
el hombre llora,
estamos juntos,
por simple razón,
me siento otra vez.
El silencio se acaba,
me siento caliente,
es un instante,
se ha roto el cristal,
ya no hay nada más.
Hay, un duelo amor, odiándote.
Hay, un duelo amor, odiándote.
Hay, un duelo amor, odiándote.
Hay, un duelo amor, odiándote.
Hay, un duelo amor, odiándote.
Hay, un duelo amor, odiándote.