De vez en cuando y para siempre
hay alguien que toca lo intocado:
alguna virgen descubre perversiones,
algún yonqui se muere en un lavabo,
algún viejo se siente enamorado.
De vez en cuando y para siempre
se puede contar lo inexplicable:
la tecla del sentimiento que se mueve,
el maduro y paciente pretendiente
de sonrisa gentil y voz afable.
De vez en cuando y para siempre
se dispara el percutor de la pistola.
El viejo Chandler sonríe inútilmente,
entra por mi ventana y lee mi mente
ella nunca volvera a estar sola.
El viejo Chandler sonríe inútilmente,
entra por mi ventana y lee mi mente
ella nunca volvera a estar sola.
De vez en cuando y para siempre
hay alguien que toca lo intocado:
alguna virgen descubre perversiones,
algún yonqui se muere en un lavabo,
algún viejo se siente enamorado.
De vez en cuando y para siempre
se puede contar lo inexplicable:
la tecla del sentimiento que se mueve,
el maduro y paciente pretendiente
de sonrisa gentil y voz afable.
De vez en cuando y para siempre
se dispara el percutor de la pistola.
El viejo Chandler sonríe inútilmente,
entra por mi ventana y lee mi mente
ella nunca volvera a estar sola.
El viejo Chandler sonríe inútilmente,
entra por mi ventana y lee mi mente
ella nunca volvera a estar sola.
De vez en cuando y para siempre