(Osiris Rodriguez Castillos)
Hay un reino bajo el agua,
un sauce me lo contó,
dónde el pejerrey escucha,
y canta el bagre cantor.
En las taipas de un asube,
yo vi un gurí pescador,
que confundiendo a las piabas,
le cantaba esta canción:
Tararira, tararira,
qué arisca y sabia que estás.
Anzuelo que cae al agua,
mojarra que te llevas.
Pica, pica, tararira,
plata viva del juncal,
mientras no se corta el hilo,
junto al agua me hallarás.
Y yo que crecí en silencio,
bajo los sauces del Yi,
cobrizo de soles largos,
comprendo bien al gurí.
Siempre la suerte fue esquiva,
cual los peces para mí,
pero él me enseñó estas coplas,
que alumbran como un candil:
Tararira, tararira,
qué arisca y sabia que estás.
Anzuelo que cae al agua,
mojarra que te llevas.
Pica, pica, tararira,
plata viva del juncal,
mientras no se corta el hilo,
junto al agua me hallarás.
Hay un reino bajo el agua,
un sauce me lo contó,
dónde el pejerrey escucha,
y canta el bagre cantor.
Hay un reino bajo el agua,
un sauce me lo contó,
dónde el pejerrey escucha,
y canta el bagre cantor.
En las taipas de un asube,
yo vi un gurí pescador,
que confundiendo a las piabas,
le cantaba esta canción:
Tararira, tararira,
qué arisca y sabia que estás.
Anzuelo que cae al agua,
mojarra que te llevas.
Pica, pica, tararira,
plata viva del juncal,
mientras no se corta el hilo,
junto al agua me hallarás.
Y yo que crecí en silencio,
bajo los sauces del Yi,
cobrizo de soles largos,
comprendo bien al gurí.
Siempre la suerte fue esquiva,
cual los peces para mí,
pero él me enseñó estas coplas,
que alumbran como un candil:
Tararira, tararira,
qué arisca y sabia que estás.
Anzuelo que cae al agua,
mojarra que te llevas.
Pica, pica, tararira,
plata viva del juncal,
mientras no se corta el hilo,
junto al agua me hallarás.
Hay un reino bajo el agua,
un sauce me lo contó,
dónde el pejerrey escucha,
y canta el bagre cantor.