No vas a creer que todo esté tan bien
que hasta creo en los golpes del corazón.
No vas a creer qué débil es tu voz
que ni siquiera oigo las palabras del adiós.
Te vas perdiendo en la memoria,
quebrando las horas de mis olvidos.
El amor no vuelve jamás, ya lo sé.
Y que los sueños sin dormir
p***to se han de olvidar.
Hay tiempo para pensar,
hay tiempo para recordar
que nunca fuimos aquellos que dijimos ser,
que dijimos ser.
No vas a creer que todo esté tan bien
que hasta creo en los golpes del corazón.
No vas a creer que débil es tu voz
que ni siquiera oigo las palabras del adiós.
El odio es fácil de engañar, ya lo sé.
Y que siempre se pierde
a solas con el corazón.
Hay tiempo para pensar,
hay tiempo para recordar
que nunca fuimos aquellos que dijimos ser.
Ahora el corazón ya no se esconde más.
Sólo pulsar, sólo latir.
Ahora espera sangrar.
Espera sangrar.
que hasta creo en los golpes del corazón.
No vas a creer qué débil es tu voz
que ni siquiera oigo las palabras del adiós.
Te vas perdiendo en la memoria,
quebrando las horas de mis olvidos.
El amor no vuelve jamás, ya lo sé.
Y que los sueños sin dormir
p***to se han de olvidar.
Hay tiempo para pensar,
hay tiempo para recordar
que nunca fuimos aquellos que dijimos ser,
que dijimos ser.
No vas a creer que todo esté tan bien
que hasta creo en los golpes del corazón.
No vas a creer que débil es tu voz
que ni siquiera oigo las palabras del adiós.
El odio es fácil de engañar, ya lo sé.
Y que siempre se pierde
a solas con el corazón.
Hay tiempo para pensar,
hay tiempo para recordar
que nunca fuimos aquellos que dijimos ser.
Ahora el corazón ya no se esconde más.
Sólo pulsar, sólo latir.
Ahora espera sangrar.
Espera sangrar.