Tus pies están en movimiento
con tan lento andar que parecen quietos.
Pero se van y no parecen regresar.
Tiemblo al pensar en tus secretos
y al respirar rancios recuerdos
que no se van y me invitan a esperar.
Por no juzgar tus dulces sueños,
tanto callé, por tanto tiempo.
Sin entender que el mal sueño era yo.
¿Qué nube cubre mis días
dejando huellas perdidas?
Tan solo espero, querida,
que el viento seque la herida.
con tan lento andar que parecen quietos.
Pero se van y no parecen regresar.
Tiemblo al pensar en tus secretos
y al respirar rancios recuerdos
que no se van y me invitan a esperar.
Por no juzgar tus dulces sueños,
tanto callé, por tanto tiempo.
Sin entender que el mal sueño era yo.
¿Qué nube cubre mis días
dejando huellas perdidas?
Tan solo espero, querida,
que el viento seque la herida.