De regreso, Mirta. Ya sebes: tres años a la sombra.
No quiero saber si me fuiste fiel, yo se que una mujer valiente
se inclina igual para el lado del hacer.
Servime algo, Mirta, parece mentira el verte como antes;
pero para el que vuelve del infierno ya no hay mas fantasias,
solo quiere un tiempo blando,
pero eso, Mirta, nunca lo sabras.
No es necesario que estes alegre, ni que prendas la luz;
entré despacio y sin que me vea nadie;
la noche se abre como un abrigo, Mirta, y es un sabado mas,
como dice el tango: Mirta, contame como andas.
Hace de cuenta que estuve navegando, es casi lo mismo
solo cambia el paisaje: abajo el mar, que nunca se ve,
arriba el cielo, el cielorraso, y tu foto en la pared.
La moda ha cambiado un poco, Mirta,
ya no hay ni un pelo largo, todos parecen soldados.
Me siento parado en un cementerio,
me recibio el frio y un nuevo gobierno;
Mirta, no recuerdo ni tu cuerpo.
Y ahora me voy, Mirta, para vos soy un extraño conocido;
si no estoy llorando no es como me la banco,
debajo de la cama asoman sus zapatos
Mirta, gracias por todo...
Salgo a la vereda, parece que ha llovido,
en la estacion retumba la estrella del norte.
¨Veni a verme cuando salgas¨, me dijo El Turco,
comes todos los dias y no hay problemas de laburo,
solo algunas noches, solo algunas noches...
salis a trabajar...
No quiero saber si me fuiste fiel, yo se que una mujer valiente
se inclina igual para el lado del hacer.
Servime algo, Mirta, parece mentira el verte como antes;
pero para el que vuelve del infierno ya no hay mas fantasias,
solo quiere un tiempo blando,
pero eso, Mirta, nunca lo sabras.
No es necesario que estes alegre, ni que prendas la luz;
entré despacio y sin que me vea nadie;
la noche se abre como un abrigo, Mirta, y es un sabado mas,
como dice el tango: Mirta, contame como andas.
Hace de cuenta que estuve navegando, es casi lo mismo
solo cambia el paisaje: abajo el mar, que nunca se ve,
arriba el cielo, el cielorraso, y tu foto en la pared.
La moda ha cambiado un poco, Mirta,
ya no hay ni un pelo largo, todos parecen soldados.
Me siento parado en un cementerio,
me recibio el frio y un nuevo gobierno;
Mirta, no recuerdo ni tu cuerpo.
Y ahora me voy, Mirta, para vos soy un extraño conocido;
si no estoy llorando no es como me la banco,
debajo de la cama asoman sus zapatos
Mirta, gracias por todo...
Salgo a la vereda, parece que ha llovido,
en la estacion retumba la estrella del norte.
¨Veni a verme cuando salgas¨, me dijo El Turco,
comes todos los dias y no hay problemas de laburo,
solo algunas noches, solo algunas noches...
salis a trabajar...