Qué pensará la calandria, cuando me ve merodeando
en un silbido apagau la pretensión de algún canto
Pensará que de envidioso tal vez la estoy imitando
o a lo mejor de contento le echo vientito a mis labios
o tal vez piense que yo soy otro b****o del campo que se
le da por silbar ni bien aparece el ruano
lo que la moza no sabe es que a veces chiflo un llanto
como un fénix de dolor que no se quema llorando
y aunque le avive la braza con algún olvido extraño
su pico se hace chamuzca pero le sigue picando.
Y en un nido de nostalgia que tejí desde hace rato
voy empollando una pena que nunca saldrá volando
por tener las alas cortas pero el cansancio muy largo
se conforma con mirar el volido de otros pájaros
por eso aquella calandria que siempre me ve silbando
piense que yo de envidioso tal vez la estoy imitando
ella canta de allá arriba entre eucalipto y álamos
como poderla imitar si yo lloro desde abajo
como poderle decir que apenitas soy un gaucho
que tiene las alas cortas y amás` muy largo el cansancio.
Qué pensará la calandria, cuando me ve merodeando
en un silbido apagau la pretensión de algún canto.
en un silbido apagau la pretensión de algún canto
Pensará que de envidioso tal vez la estoy imitando
o a lo mejor de contento le echo vientito a mis labios
o tal vez piense que yo soy otro b****o del campo que se
le da por silbar ni bien aparece el ruano
lo que la moza no sabe es que a veces chiflo un llanto
como un fénix de dolor que no se quema llorando
y aunque le avive la braza con algún olvido extraño
su pico se hace chamuzca pero le sigue picando.
Y en un nido de nostalgia que tejí desde hace rato
voy empollando una pena que nunca saldrá volando
por tener las alas cortas pero el cansancio muy largo
se conforma con mirar el volido de otros pájaros
por eso aquella calandria que siempre me ve silbando
piense que yo de envidioso tal vez la estoy imitando
ella canta de allá arriba entre eucalipto y álamos
como poderla imitar si yo lloro desde abajo
como poderle decir que apenitas soy un gaucho
que tiene las alas cortas y amás` muy largo el cansancio.
Qué pensará la calandria, cuando me ve merodeando
en un silbido apagau la pretensión de algún canto.