Después de limpiar de escoria la fachada
del confort del ciudadano,
apatrullando una calle desconchada
por fumanchús y otomanos.
"Pa' luego es tarde, ábrete una temporada",
me sopló un ciego vidente.
Y me empadroné en Marbella
en una suite de una estrella
con mi palillo de dientes,
Vacilando de costao
donde corta el bacalao,
la jet set del delincuente.
Donde los jeques
blanquean los cheques
del petrodólar
y marean a don Quijote
con un lingote
de Pepsi-Cola.
Sin kagebés, en la CIA
sobran espías
y por consiguientes
James Bond se ve obsoleto,
ningún servicio secreto
contrata agentes como Torrente.
En Estrocolmo y en Canadá
en Cannes y en Bogotá,
si pides tapa en un bar
te llaman demente.
En Malasañas y en Washington,
en San Remos y en Hong Kong,
mi Aleti, mi España y yo
semos diferentes.
Lo digo como lo bailo
y tal y tal
Me beneficiaba a todas y ninguna
se quejó de malos tratos.
La Interpol y los niñatos de la tuna
me ilustraban los zapatos.
Si a ratos me puso cuernos la fortuna,
fue de forma fraudulenta.
La patria es una fulana,
menos mi madre y mi hermana,
no hay coño que no esté en venta.
Me cago en los detectives
americanos que viven
en Jollivú de las rentas.
Donde los reyes más goldwin meyers
de la baraja
chulean a Mortadelo con crecepelo
de las rebajas.
El niño de Scotland Yard
torea regular
y por consiguientes
Sherlock Holmes se acompleja,
para cortar las orejas
hay que tenerlos como Torrente.
En Acrapulcos y en Estoril,
en Marrakech y en Dublín
hay más estrés que en Madrid
y menos ambiente.
En Montecarlo, en Honolulú,
en Yacarta y en Moscú,
les falta un Puerto Banús
(semos diferentes).
Lo dice Torrente,
que es un servidor,
que a las Mata Haris
les hace un afoto,
les vende un amoto,
les birla el reloj.
Pregúntale al Fari
y al Tony Leblanc,
que son namber uanes
de los club de fanes
en plan virtual.
Porque me lo monto
sin poner el cazo,
me llaman el brazo
tonto de la ley.
Dos y dos son cinco, (te la jinco)
menos una, seis (quéeeee?)
y tós los diyéis (di...quei?)
del mundo mundial (venga ya!)
me dicen Chapeau (pourquoi?)
porque ya lo veis, (y tal y tal...)
sigo siendo el rey (demostración!)
sigo siendo el rey... (y tal y tal...)
del confort del ciudadano,
apatrullando una calle desconchada
por fumanchús y otomanos.
"Pa' luego es tarde, ábrete una temporada",
me sopló un ciego vidente.
Y me empadroné en Marbella
en una suite de una estrella
con mi palillo de dientes,
Vacilando de costao
donde corta el bacalao,
la jet set del delincuente.
Donde los jeques
blanquean los cheques
del petrodólar
y marean a don Quijote
con un lingote
de Pepsi-Cola.
Sin kagebés, en la CIA
sobran espías
y por consiguientes
James Bond se ve obsoleto,
ningún servicio secreto
contrata agentes como Torrente.
En Estrocolmo y en Canadá
en Cannes y en Bogotá,
si pides tapa en un bar
te llaman demente.
En Malasañas y en Washington,
en San Remos y en Hong Kong,
mi Aleti, mi España y yo
semos diferentes.
Lo digo como lo bailo
y tal y tal
Me beneficiaba a todas y ninguna
se quejó de malos tratos.
La Interpol y los niñatos de la tuna
me ilustraban los zapatos.
Si a ratos me puso cuernos la fortuna,
fue de forma fraudulenta.
La patria es una fulana,
menos mi madre y mi hermana,
no hay coño que no esté en venta.
Me cago en los detectives
americanos que viven
en Jollivú de las rentas.
Donde los reyes más goldwin meyers
de la baraja
chulean a Mortadelo con crecepelo
de las rebajas.
El niño de Scotland Yard
torea regular
y por consiguientes
Sherlock Holmes se acompleja,
para cortar las orejas
hay que tenerlos como Torrente.
En Acrapulcos y en Estoril,
en Marrakech y en Dublín
hay más estrés que en Madrid
y menos ambiente.
En Montecarlo, en Honolulú,
en Yacarta y en Moscú,
les falta un Puerto Banús
(semos diferentes).
Lo dice Torrente,
que es un servidor,
que a las Mata Haris
les hace un afoto,
les vende un amoto,
les birla el reloj.
Pregúntale al Fari
y al Tony Leblanc,
que son namber uanes
de los club de fanes
en plan virtual.
Porque me lo monto
sin poner el cazo,
me llaman el brazo
tonto de la ley.
Dos y dos son cinco, (te la jinco)
menos una, seis (quéeeee?)
y tós los diyéis (di...quei?)
del mundo mundial (venga ya!)
me dicen Chapeau (pourquoi?)
porque ya lo veis, (y tal y tal...)
sigo siendo el rey (demostración!)
sigo siendo el rey... (y tal y tal...)