Robar, esa horrible palabra cuando robas
El alma o la calma, de quien no come nada
Mírame yo soy un ladrón, pero de momentos bellos
De gruesos cabellos, que le hizo esta canción
Y robé su cuello, sus momentos más bellos
Su cama, su cintura de avispa, y sus mejores recuerdos
Morir, saber que moriría que sí, que sí
Por pegarle a mi cuerpo, que la llevo muy dentro
Parar el viento, escalar, seguir subiendo
Congelar el tiempo y tocar el cielo
Parar el viento, escalar, seguir subiendo
Congelar el tiempo y tocar el cielo
Con los dedos, con los dedos, con los dedos, aah
Quiero estirar a muerte todo el tiempo a su lado
Convertir las horas galgas en caracoles cojeando
Y mirar a las estrellas y no lavar jamás las huellas
De sus manos en mi pelo, de sus labios en mi pecho
Hablar, esa horrible palabra cuando ladras
Presumes mucho siempre y nunca dices nada
Mírame yo sí presumo de que no consumo
No fumo y escupo a la cara falsa de quien ladra
Tanto, no hables tanto, me estás mareando
Hablan nada esas mandíbulas rayadas
Ella es ahora lo único que me importa
Enterrar tu puño, desoír tu historia
Tus aburridas noches, tus borrachas norias
Tu varicela de goles, pichichis y victorias, cobarde
Cómetete tus cuernos, por pegarla sola
Por ponerte ciego en ese antro de moda
Y qué daría yo, qué daría yo
Por tener sus labios, por tenerla toda
Por abrir su risa, mojar su boca
Tropezar en sus ojos, y beber en sus olas
Abrir su risa, mojar su boca
Tropezar en sus ojos, y beber cada noche sus olas
Sus olas, sus olas, aah
Quiero estirar a muerte todo el tiempo a su lado
Convertir las horas galgas en caracoles cojeando
Y mirar a las estrellas y no lavar jamás las huellas
De sus manos en mi pelo, de sus labios en mi pecho
Recorrer las curvas lindas de su cuerpo azucarado
Arañar la seda fina de su pelo despeinado
Y acostar nuestras sonrisas, y matar todas las prisas
Se atraviesan como espinas, esos besos de latina
He parado el tiempo y vaciado la arena
De aquel viejo reloj
He estirado el tiempo con un para siempre
Del chicle infinito en mis dientes
Quiero estirar a muerte todo el tiempo a su lado
Convertir las horas galgas en caracoles cojeando
Y mirar a las estrellas y no lavar jamás las huellas
De sus manos en mi pelo, de sus labios en mi pecho
Recorrer las curvas lindas de su cuerpo azucarado
Arañar la seda fina de su pelo despeinado
Y acostar nuestras sonrisas, y matar todas las prisas
Se atraviesan como espinas, esos besos de latina
El alma o la calma, de quien no come nada
Mírame yo soy un ladrón, pero de momentos bellos
De gruesos cabellos, que le hizo esta canción
Y robé su cuello, sus momentos más bellos
Su cama, su cintura de avispa, y sus mejores recuerdos
Morir, saber que moriría que sí, que sí
Por pegarle a mi cuerpo, que la llevo muy dentro
Parar el viento, escalar, seguir subiendo
Congelar el tiempo y tocar el cielo
Parar el viento, escalar, seguir subiendo
Congelar el tiempo y tocar el cielo
Con los dedos, con los dedos, con los dedos, aah
Quiero estirar a muerte todo el tiempo a su lado
Convertir las horas galgas en caracoles cojeando
Y mirar a las estrellas y no lavar jamás las huellas
De sus manos en mi pelo, de sus labios en mi pecho
Hablar, esa horrible palabra cuando ladras
Presumes mucho siempre y nunca dices nada
Mírame yo sí presumo de que no consumo
No fumo y escupo a la cara falsa de quien ladra
Tanto, no hables tanto, me estás mareando
Hablan nada esas mandíbulas rayadas
Ella es ahora lo único que me importa
Enterrar tu puño, desoír tu historia
Tus aburridas noches, tus borrachas norias
Tu varicela de goles, pichichis y victorias, cobarde
Cómetete tus cuernos, por pegarla sola
Por ponerte ciego en ese antro de moda
Y qué daría yo, qué daría yo
Por tener sus labios, por tenerla toda
Por abrir su risa, mojar su boca
Tropezar en sus ojos, y beber en sus olas
Abrir su risa, mojar su boca
Tropezar en sus ojos, y beber cada noche sus olas
Sus olas, sus olas, aah
Quiero estirar a muerte todo el tiempo a su lado
Convertir las horas galgas en caracoles cojeando
Y mirar a las estrellas y no lavar jamás las huellas
De sus manos en mi pelo, de sus labios en mi pecho
Recorrer las curvas lindas de su cuerpo azucarado
Arañar la seda fina de su pelo despeinado
Y acostar nuestras sonrisas, y matar todas las prisas
Se atraviesan como espinas, esos besos de latina
He parado el tiempo y vaciado la arena
De aquel viejo reloj
He estirado el tiempo con un para siempre
Del chicle infinito en mis dientes
Quiero estirar a muerte todo el tiempo a su lado
Convertir las horas galgas en caracoles cojeando
Y mirar a las estrellas y no lavar jamás las huellas
De sus manos en mi pelo, de sus labios en mi pecho
Recorrer las curvas lindas de su cuerpo azucarado
Arañar la seda fina de su pelo despeinado
Y acostar nuestras sonrisas, y matar todas las prisas
Se atraviesan como espinas, esos besos de latina