esas miradas maternales de las vacas
me vigilan mientras juego, mientras busco en sus majadas
los consejos de un amigo, de un viejo indio muscaria
que aparece curviforme y me llena de luz el alma
y ¡ay, qué dolor! cuando se apague su divina voz
y quede solo parado ante el sol
con este trauma y sin saber quién soy
dicen que un día hubo una gran explosión
esas miradas maternales de las vacas
me vigilan mientras juego, mientras busco en sus majadas
los consejos de un amigo, de un viejo indio muscaria
que aparece curviforme y me llena de luz el alma
y ¡ay, qué dolor! cuando se apague su divina voz
y quede solo parado ante el sol
con este trauma y sin saber quién soy
dicen que un día hubo una gran explosión
¡ay, qué dolor! cuando se apague su divina voz
y quede solo parado ante el sol
con este trauma y sin saber quién soy
dicen que un día hubo una gran explosión
me vigilan mientras juego, mientras busco en sus majadas
los consejos de un amigo, de un viejo indio muscaria
que aparece curviforme y me llena de luz el alma
y ¡ay, qué dolor! cuando se apague su divina voz
y quede solo parado ante el sol
con este trauma y sin saber quién soy
dicen que un día hubo una gran explosión
esas miradas maternales de las vacas
me vigilan mientras juego, mientras busco en sus majadas
los consejos de un amigo, de un viejo indio muscaria
que aparece curviforme y me llena de luz el alma
y ¡ay, qué dolor! cuando se apague su divina voz
y quede solo parado ante el sol
con este trauma y sin saber quién soy
dicen que un día hubo una gran explosión
¡ay, qué dolor! cuando se apague su divina voz
y quede solo parado ante el sol
con este trauma y sin saber quién soy
dicen que un día hubo una gran explosión