Con el alma llena de amargura
y sin saber qué hacer,
he venido aquí con esta duda;
a escuchar tu voz.
Di que no es verdad,
lo que murmuran de los dos,
di que no es verdad,
que has dejado a mi amor;
di que no es verdad,
que es envidia o maldad,
de alguien que quiere robar tu corazón.
No podrán jamás a nuestras almas separar,
no podrán jamás nuestro amor profanar;
habla por favor, ya por bien ya por mal,
para poder sonreír o llorar.
No podrán jamás a nuestras almas separar,
no podrán jamás nuestro amor profanar;
habla por favor, ya por bien ya por mal,
para poder sonreír o llorar.
y sin saber qué hacer,
he venido aquí con esta duda;
a escuchar tu voz.
Di que no es verdad,
lo que murmuran de los dos,
di que no es verdad,
que has dejado a mi amor;
di que no es verdad,
que es envidia o maldad,
de alguien que quiere robar tu corazón.
No podrán jamás a nuestras almas separar,
no podrán jamás nuestro amor profanar;
habla por favor, ya por bien ya por mal,
para poder sonreír o llorar.
No podrán jamás a nuestras almas separar,
no podrán jamás nuestro amor profanar;
habla por favor, ya por bien ya por mal,
para poder sonreír o llorar.