Por las Noches, cara sucia de angelito con bluyín, vende rosas por las mesas del boliche de Bachín. Si la luna brilla sobre la parrilla, come luna y pan de hollín.
Cada día en su tristeza que no quiere amanecer, lo madruga un seis de enero con la estrella del revés, y tres reyes gatos roban sus zapatos, uno izquierdo y el otro ¡también!
Chiquilín, dame un ramo de voz, así salgo a vender mis vergüenzas en flor. Baleáme con tres rosas que duelan a cuenta del hambre que no te entendí, Chiquilín.
Cuando el sol pone a los pibes delantales de aprender, el aprende cuánto cero le quedaba por saber. Y a su madre mira, yira que te yira, yira que te yira, pero no la quiere ver.
Cada aurora en la basura, con un pan y un tallarín se fabrica un barrilete para irse y ¡sigue aquí!
Es un hombre extraño, niño de mil años, que por dento le enreda el piolín. Chiquilín, dame un ramo de voz, así salgo a vender mis vergüenzas en flor. Baleáme con tres rosas que duelan a cuenta del hambre que no te entendí, Chiquilín.
Cada día en su tristeza que no quiere amanecer, lo madruga un seis de enero con la estrella del revés, y tres reyes gatos roban sus zapatos, uno izquierdo y el otro ¡también!
Chiquilín, dame un ramo de voz, así salgo a vender mis vergüenzas en flor. Baleáme con tres rosas que duelan a cuenta del hambre que no te entendí, Chiquilín.
Cuando el sol pone a los pibes delantales de aprender, el aprende cuánto cero le quedaba por saber. Y a su madre mira, yira que te yira, yira que te yira, pero no la quiere ver.
Cada aurora en la basura, con un pan y un tallarín se fabrica un barrilete para irse y ¡sigue aquí!
Es un hombre extraño, niño de mil años, que por dento le enreda el piolín. Chiquilín, dame un ramo de voz, así salgo a vender mis vergüenzas en flor. Baleáme con tres rosas que duelan a cuenta del hambre que no te entendí, Chiquilín.