No reniegues del pasado, no reniegues del fracaso
no reniegues de los pasos mal dados
no enloquezcas con el tiempo que ahora crees
se cayó de tus manos
no interrumpas a la vida poniéndole zancadillas
de lágrimas pasadas y rotas
no amanezcas sollozando, temblando, moqueando
después de una noche eterna
Y rompe de una vez la cadena que te ahoga
deja de ser tu juez y acelera
que las horas pasan y no te esperan, despierta
sin esconder los ojos tras las trincheras
de tus arrugas marcadas en el alma
como una pequeñuela sin muñeca
que se deja vencer por el miedo a una silueta
anclada sólo en su cabeza
No das pena, no te des pena
No intentes resumir en un día tu vida
ni en un año los desengaños ya pasados
se acabó el veneno que absorbía tu tiempo
y lo ha volado el viento que refresca tu cara
asumir no es morir sino prepararse
para continuar adelante
No das pena, no te des pena
no das pena, no te des pena
no das pena, no te des pena.
no reniegues de los pasos mal dados
no enloquezcas con el tiempo que ahora crees
se cayó de tus manos
no interrumpas a la vida poniéndole zancadillas
de lágrimas pasadas y rotas
no amanezcas sollozando, temblando, moqueando
después de una noche eterna
Y rompe de una vez la cadena que te ahoga
deja de ser tu juez y acelera
que las horas pasan y no te esperan, despierta
sin esconder los ojos tras las trincheras
de tus arrugas marcadas en el alma
como una pequeñuela sin muñeca
que se deja vencer por el miedo a una silueta
anclada sólo en su cabeza
No das pena, no te des pena
No intentes resumir en un día tu vida
ni en un año los desengaños ya pasados
se acabó el veneno que absorbía tu tiempo
y lo ha volado el viento que refresca tu cara
asumir no es morir sino prepararse
para continuar adelante
No das pena, no te des pena
no das pena, no te des pena
no das pena, no te des pena.