Alzo la vista hacia el sol,
la lágrima cae, con ella el temor.
Mira entre su alrededor,
y piensa que así va mejor.
Camina y no logra entender
qué es lo que falta que deba tener.
Comienza a ver sombras pasar,
tal vez es mejor no mirar.
Y el lamento empieza a hablar,
miraré quién es, de qué va,
y parar la extraña risa en su pesar.
Su ira sigue a más, aunque todo en realidad
la calumnia se comienza a disparar.
Y mil años pasarán antes de abandonar,
ni su rabia ni su mal, solamente la verdad,
cara al viento seguiré sin mirar atrás,
ante su mediocridad nada me podrá cambiar.
Y el lamento empieza a hablar,
y su ira sigue a más,
pero nunca Dios se encuentra en mi verdad.
Y mil años pasarán antes de abandonar,
ni su rabia ni su mal, solamente la verdad,
¡cara al viento seguiré!
la lágrima cae, con ella el temor.
Mira entre su alrededor,
y piensa que así va mejor.
Camina y no logra entender
qué es lo que falta que deba tener.
Comienza a ver sombras pasar,
tal vez es mejor no mirar.
Y el lamento empieza a hablar,
miraré quién es, de qué va,
y parar la extraña risa en su pesar.
Su ira sigue a más, aunque todo en realidad
la calumnia se comienza a disparar.
Y mil años pasarán antes de abandonar,
ni su rabia ni su mal, solamente la verdad,
cara al viento seguiré sin mirar atrás,
ante su mediocridad nada me podrá cambiar.
Y el lamento empieza a hablar,
y su ira sigue a más,
pero nunca Dios se encuentra en mi verdad.
Y mil años pasarán antes de abandonar,
ni su rabia ni su mal, solamente la verdad,
¡cara al viento seguiré!