Oí Bendita Historia, de Jesús quien de Su Gloria,
Al Calvario decidió venir, para salvarme a mí.
Su Sangre derramada, se aplicó feliz a mi alma,
Me dio Victoria sin igual cuando me arrepentí.
Ya tengo la Victoria, pues Cristo me salva,
Buscóme y compróme con su Divino Amor.
Me imparte de Su Gloria, Su Paz inunda mi alma,
Victoria me concedió, cuando por mí murió.
Oí que en Dulce Gloria, hay Mansiones de Victoria,
Que Su Santa Mano preparó, para los que Él salvó.
Espero unir mi canto al del grupo Sacrosanto,
Que victorioso rendirá tributo al Redentor.
Ya tengo la Victoria, pues Cristo me salva,
Buscóme y compróme con su Divino Amor.
Me imparte de Su Gloria, Su Paz inunda mi alma,
Victoria me concedió, cuando por mí murió.
Victoria me concedió, cuando por mí murió...
Al Calvario decidió venir, para salvarme a mí.
Su Sangre derramada, se aplicó feliz a mi alma,
Me dio Victoria sin igual cuando me arrepentí.
Ya tengo la Victoria, pues Cristo me salva,
Buscóme y compróme con su Divino Amor.
Me imparte de Su Gloria, Su Paz inunda mi alma,
Victoria me concedió, cuando por mí murió.
Oí que en Dulce Gloria, hay Mansiones de Victoria,
Que Su Santa Mano preparó, para los que Él salvó.
Espero unir mi canto al del grupo Sacrosanto,
Que victorioso rendirá tributo al Redentor.
Ya tengo la Victoria, pues Cristo me salva,
Buscóme y compróme con su Divino Amor.
Me imparte de Su Gloria, Su Paz inunda mi alma,
Victoria me concedió, cuando por mí murió.
Victoria me concedió, cuando por mí murió...