Donde quiera que estés ha de llegarte
la ofrenda de mi voz y agradecerte
el luminoso trazo que nos dejas
y el soleado mañana que entregaste.
Un solo norte, un solo empeño,
tu suelo corazon de que eres dueño
sacrificando luz por darte gloria,
sus colores en sombra soñarías,
morirías tus sombras sin dolores.
La tierra va tomando de tu estrella
y tu estrella morena va brillando
del llanto que dolida va quemando
y tu tierra contigo está llorando.
Mauro, puño de oro,
no te digo adiós si aquí te quedas
dentro de mi corazón, hermano honrado,
quede tu riela y luz y el aleluya
que a lo que de mi voz te iré cantando.
la ofrenda de mi voz y agradecerte
el luminoso trazo que nos dejas
y el soleado mañana que entregaste.
Un solo norte, un solo empeño,
tu suelo corazon de que eres dueño
sacrificando luz por darte gloria,
sus colores en sombra soñarías,
morirías tus sombras sin dolores.
La tierra va tomando de tu estrella
y tu estrella morena va brillando
del llanto que dolida va quemando
y tu tierra contigo está llorando.
Mauro, puño de oro,
no te digo adiós si aquí te quedas
dentro de mi corazón, hermano honrado,
quede tu riela y luz y el aleluya
que a lo que de mi voz te iré cantando.