Tenés un viejo, y pasás por gran señora,
que le sacás todo el vento
y lo engañás como a un gil.
Tenés un arte pa' engrupir a los varones
que hasta a un gigoló buen mozo
le sacaste buen botín.
Y hasta has hecho de un cafiolo remanyao
un mishé atolondrao que te da lo que pedís.
Con ese cancha porque no hacés un tratado
"La moderna cachadora o la forma de engrupir".
Cachadora,
cuando te encanás a un coso
ni por broma se te pianta;
¡Atorranta!
Cachadora,
te tomás lo mismo el tiempo
al botón que al comisario,
¡Qué de otarios!...
Vampiresa,
che, Gautier de Puente Alsina
ya no andás por las esquinas,
te paseás en voiturette.
La otra noche caminando por Corrientes
te enconstraste con el tano
que al principio te empilchó;
lo llamaste, pero el tano ya canchero,
por la biaba que le diste
se hizo humo entre el montón.
Y a otro pipiolo que pagaba copetines
y pa' comprarte botines amuraba hasta el reloj
al campanearte pegó un viraje en la esquina
y te dijo que vendría pero nunca más volvió.
que le sacás todo el vento
y lo engañás como a un gil.
Tenés un arte pa' engrupir a los varones
que hasta a un gigoló buen mozo
le sacaste buen botín.
Y hasta has hecho de un cafiolo remanyao
un mishé atolondrao que te da lo que pedís.
Con ese cancha porque no hacés un tratado
"La moderna cachadora o la forma de engrupir".
Cachadora,
cuando te encanás a un coso
ni por broma se te pianta;
¡Atorranta!
Cachadora,
te tomás lo mismo el tiempo
al botón que al comisario,
¡Qué de otarios!...
Vampiresa,
che, Gautier de Puente Alsina
ya no andás por las esquinas,
te paseás en voiturette.
La otra noche caminando por Corrientes
te enconstraste con el tano
que al principio te empilchó;
lo llamaste, pero el tano ya canchero,
por la biaba que le diste
se hizo humo entre el montón.
Y a otro pipiolo que pagaba copetines
y pa' comprarte botines amuraba hasta el reloj
al campanearte pegó un viraje en la esquina
y te dijo que vendría pero nunca más volvió.