Como me gusta verte bailar en los bares de nada,
cómo me gusta verte saltar en el aire fresco de la mañana
cuando aproximas tu extremidad al extremo
de la barra extremada.
Cuando sonríes con tus ojos de ida y vuelta
como una guajira a los extraños
que viene a buscarte las cosquillas.
Una de cal y otra de arena
Yo rodeao de niñas buenas que han de
compartir mi aire, cada copa es el momento del refugio,
de otro cuento, de otra historia interminable.
Quiero la mitad de todo, porque la mitad de nada
no será suficiente.
Quiero que me quieras porque quererte quisiera
aunque sea impertinente.
Cómo me gusta cuando vienes a verme a tocar
o cuando me tocas.
Cómo me gusta hacer la fotosíntesis contigo
como una hoja de coca.
Te sueltas el pelo, me suelto la serotonina
cuando caminas con tu c**o de ida y vuelta
como una habanera en Cádiz es evidente que
me buscas las cosquillas.
Una de cal y otra de arena, y yo sin rumbo
en las aceras a las que les robo el aire.
Cada canción es el momento del refugio
de otro cuento, de otra historia interminable.
Quiero la mitad de todo, porque la mitad de nada
no será suficiente.
Quiero que me quieras porque quererte quisiera
aunque sea impertinente
cómo me gusta verte saltar en el aire fresco de la mañana
cuando aproximas tu extremidad al extremo
de la barra extremada.
Cuando sonríes con tus ojos de ida y vuelta
como una guajira a los extraños
que viene a buscarte las cosquillas.
Una de cal y otra de arena
Yo rodeao de niñas buenas que han de
compartir mi aire, cada copa es el momento del refugio,
de otro cuento, de otra historia interminable.
Quiero la mitad de todo, porque la mitad de nada
no será suficiente.
Quiero que me quieras porque quererte quisiera
aunque sea impertinente.
Cómo me gusta cuando vienes a verme a tocar
o cuando me tocas.
Cómo me gusta hacer la fotosíntesis contigo
como una hoja de coca.
Te sueltas el pelo, me suelto la serotonina
cuando caminas con tu c**o de ida y vuelta
como una habanera en Cádiz es evidente que
me buscas las cosquillas.
Una de cal y otra de arena, y yo sin rumbo
en las aceras a las que les robo el aire.
Cada canción es el momento del refugio
de otro cuento, de otra historia interminable.
Quiero la mitad de todo, porque la mitad de nada
no será suficiente.
Quiero que me quieras porque quererte quisiera
aunque sea impertinente