Muele, que muele el trapiche,
Y en su moler, y en su moler,
Hasta la vida del hombre,
Muele también, muele también.
Tumbao sobre la maloja,
Pobre de mí, pobre de mí,
Sin que me arrime consuelos,
El yaraví, el yaraví.
Verde cañita de azúcar,
¡qué dulce es, qué dulce es!,
Pero al final de la zafra,
Se vuelve hiel, se vuelve hiel.
Yo tengo un sueño secreto,
Vivo por él, vivo por él,
No hay trapiche que a mi sueño,
Pueda moler, pueda moler.
No hay trapiche que a mi sueño,
Pueda moler, pueda moler.
Ha de llegar algún tiempo,
¿cuándo será? ¿cuándo será?,
En que te sienta mi amigo,
Cañaveral, cañaveral.
En que te sienta mi amigo,
Cañaveral, cañaveral.
El sol de alguna mañana,
Me alumbrará, me alumbrará,
Cantando sobre los surcos,
Cañaveral, cañaveral.
Muele, que muele el trapiche,
Y en su moler, y en su moler,
Hasta la vida del hombre,
Muele también, muele también.
Y en su moler, y en su moler,
Hasta la vida del hombre,
Muele también, muele también.
Tumbao sobre la maloja,
Pobre de mí, pobre de mí,
Sin que me arrime consuelos,
El yaraví, el yaraví.
Verde cañita de azúcar,
¡qué dulce es, qué dulce es!,
Pero al final de la zafra,
Se vuelve hiel, se vuelve hiel.
Yo tengo un sueño secreto,
Vivo por él, vivo por él,
No hay trapiche que a mi sueño,
Pueda moler, pueda moler.
No hay trapiche que a mi sueño,
Pueda moler, pueda moler.
Ha de llegar algún tiempo,
¿cuándo será? ¿cuándo será?,
En que te sienta mi amigo,
Cañaveral, cañaveral.
En que te sienta mi amigo,
Cañaveral, cañaveral.
El sol de alguna mañana,
Me alumbrará, me alumbrará,
Cantando sobre los surcos,
Cañaveral, cañaveral.
Muele, que muele el trapiche,
Y en su moler, y en su moler,
Hasta la vida del hombre,
Muele también, muele también.