Como un cuento que no terminaba,
el futuro nos traicionaba,
tanto tiempo sin creer,
creímos no creer en nada.
Un viento fresco vendría
abriendo paso, curando heridas,
somos tantos que al dolor
lo convirtió en alegría.
La intuición y el corazón
le resisten a la mentira,
es la fe, la nueva fe,
como una estrella que nos guía.
Un surco se abrió en el continente,
para sembrar nuestro sueño de siempre,
qué lindo mostrarle al mundo qué bien se siente
este abrazo.
Sueño loco que nos abraza
por cordilleras, ríos y playas,
para seguir caminando
los niños al hombro, viaja la esperanza.
Un surco se abrió en el continente,
para sembrar nuestro sueño de siempre,
qué lindo mostrarle al mundo qué bien se siente
este abrazo latinoamericano.
Un surco se abrió en el continente,
para sembrar nuestro sueño de siempre,
qué lindo mostrarle al mundo qué bien se siente
este abrazo latinoamericano.
Un surco se abrió en el continente,
para sembrar nuestro sueño de siempre,
qué lindo mostrarle al mundo qué bien se siente
este abrazo latinoamericano.
el futuro nos traicionaba,
tanto tiempo sin creer,
creímos no creer en nada.
Un viento fresco vendría
abriendo paso, curando heridas,
somos tantos que al dolor
lo convirtió en alegría.
La intuición y el corazón
le resisten a la mentira,
es la fe, la nueva fe,
como una estrella que nos guía.
Un surco se abrió en el continente,
para sembrar nuestro sueño de siempre,
qué lindo mostrarle al mundo qué bien se siente
este abrazo.
Sueño loco que nos abraza
por cordilleras, ríos y playas,
para seguir caminando
los niños al hombro, viaja la esperanza.
Un surco se abrió en el continente,
para sembrar nuestro sueño de siempre,
qué lindo mostrarle al mundo qué bien se siente
este abrazo latinoamericano.
Un surco se abrió en el continente,
para sembrar nuestro sueño de siempre,
qué lindo mostrarle al mundo qué bien se siente
este abrazo latinoamericano.
Un surco se abrió en el continente,
para sembrar nuestro sueño de siempre,
qué lindo mostrarle al mundo qué bien se siente
este abrazo latinoamericano.