Otro día ha pasado
y mis sueños bien colgaos,
vivo de tus ansias de pecao.
Prefiero la resaca amarga de ilusión
a la amargura crónica del no intentarlo.
En un descuido de un verano,
por tenerte entre mis manos,
se juntaron la avaricia y el alcohol.
En un descuido de tus manos,
de las noches de verano,
padre acusando en el balcón.
A este mundo necio
en el que todo tiene precio,
a este mundo no me agarro yo.
Harto de etiquetas
de bajarme la bragueta,
de no poder gritar esta canción.
En un descuido de un verano,
por tenerte entre mis manos,
se juntaron la avaricia y el alcohol.
En un descuido de tus manos,
de las noches de verano,
padre acusando en el balcón.
Otro día ha pasado
y mañana no es mejor,
somos las ovejas del señor.
Gente sin ideales frente al televisor
sueño perfecto p'al dictador.
En el regazo de tus brazos
se aguantan bien los palos,
ya no tengo más preocupación.
Desconecto por un rato,
sin agobios ni trabajos,
libres y abrazaos en el sillón.
y mis sueños bien colgaos,
vivo de tus ansias de pecao.
Prefiero la resaca amarga de ilusión
a la amargura crónica del no intentarlo.
En un descuido de un verano,
por tenerte entre mis manos,
se juntaron la avaricia y el alcohol.
En un descuido de tus manos,
de las noches de verano,
padre acusando en el balcón.
A este mundo necio
en el que todo tiene precio,
a este mundo no me agarro yo.
Harto de etiquetas
de bajarme la bragueta,
de no poder gritar esta canción.
En un descuido de un verano,
por tenerte entre mis manos,
se juntaron la avaricia y el alcohol.
En un descuido de tus manos,
de las noches de verano,
padre acusando en el balcón.
Otro día ha pasado
y mañana no es mejor,
somos las ovejas del señor.
Gente sin ideales frente al televisor
sueño perfecto p'al dictador.
En el regazo de tus brazos
se aguantan bien los palos,
ya no tengo más preocupación.
Desconecto por un rato,
sin agobios ni trabajos,
libres y abrazaos en el sillón.