Otra noche en una barra
conversando con el vino
ese amigo al que cuenta
la historia que ha sufrido.
Esa noche fue distinta,
el sabor de las caricias
que ella regaló en un baile.
Fue tan dulce y caprichoso
qe inundó los seis sentidos
del sediento visitante.
¿Cómo pudo aquella ingrata
compartir aquel momento
de alegría y de lamento
con el hombre de otra dama?
¿Cómo pudo aquella ingrata
compartir aquel momento
de alegría y de lamento
con el hombre de otra dama?
Entra las mil y una telas
no vió ni un hilo de vida,
sólo una sonrisa quieta.
Se vió sola en esa cama
que hace nada dos ingenuos
compartieron hasta la mañana.
Desde entonces siempre vuelve a esa barra
cada noche donde llora y sonríe.
No consigue deshacerse
de un recuerdo que le ahoga,
le atormenta y le reprime.
¿Cómo pudo aquella ingrata
compartir aquel momento
de alegría y de lamento
con el hombre de otra dama?
¿Cómo pudo aquella ingrata
compartir aquel momento
de alegría y de lamento
con el hombre de otra dama?
¿Cómo pudo aquella ingrata
compartir aquel momento
de alegría y de lamento
con el hombre de otra dama?
conversando con el vino
ese amigo al que cuenta
la historia que ha sufrido.
Esa noche fue distinta,
el sabor de las caricias
que ella regaló en un baile.
Fue tan dulce y caprichoso
qe inundó los seis sentidos
del sediento visitante.
¿Cómo pudo aquella ingrata
compartir aquel momento
de alegría y de lamento
con el hombre de otra dama?
¿Cómo pudo aquella ingrata
compartir aquel momento
de alegría y de lamento
con el hombre de otra dama?
Entra las mil y una telas
no vió ni un hilo de vida,
sólo una sonrisa quieta.
Se vió sola en esa cama
que hace nada dos ingenuos
compartieron hasta la mañana.
Desde entonces siempre vuelve a esa barra
cada noche donde llora y sonríe.
No consigue deshacerse
de un recuerdo que le ahoga,
le atormenta y le reprime.
¿Cómo pudo aquella ingrata
compartir aquel momento
de alegría y de lamento
con el hombre de otra dama?
¿Cómo pudo aquella ingrata
compartir aquel momento
de alegría y de lamento
con el hombre de otra dama?
¿Cómo pudo aquella ingrata
compartir aquel momento
de alegría y de lamento
con el hombre de otra dama?