Esta vez la paranoia será el Dios
de los que hablan con sustancias.
Dejando marchar la marcha del Robot,
meten fiebre en sus gargantas.
¿Y que me das por no saber
lo prohibitivo en tu cinismo?
¿Vos qué me das?
Psicótica prudencia para medir su conciencia.
Así es el lema: Pequeños Rostros en Piezas.
Si el Robot ya colgó la hora del reloj,
todos dirán que siga la fiesta.
Y bailarán por conocer
lo prohibitivo en sus caprichos.
¿Qué? ¿Quieren más?
Y te ví, mujer, con tu gran canción
y con el plan de encontrarme entre mi gente.
Esos labios que no paran de perderme.
Dejémonos escapar... dejémonos escapar!
Y volví, mujer, con tu gran canción,
y con el plan de arrojarme a las fuentes
con el agua de la pasión, por favor,
Dejémonos escapar!
¿Y qué me das por no saber
lo prohibitivo en tus martirios?
¿Y qué me das por conocer
los caprichos del placer?
Fuente: musica.com
Letra añadida por BillyNelson
de los que hablan con sustancias.
Dejando marchar la marcha del Robot,
meten fiebre en sus gargantas.
¿Y que me das por no saber
lo prohibitivo en tu cinismo?
¿Vos qué me das?
Psicótica prudencia para medir su conciencia.
Así es el lema: Pequeños Rostros en Piezas.
Si el Robot ya colgó la hora del reloj,
todos dirán que siga la fiesta.
Y bailarán por conocer
lo prohibitivo en sus caprichos.
¿Qué? ¿Quieren más?
Y te ví, mujer, con tu gran canción
y con el plan de encontrarme entre mi gente.
Esos labios que no paran de perderme.
Dejémonos escapar... dejémonos escapar!
Y volví, mujer, con tu gran canción,
y con el plan de arrojarme a las fuentes
con el agua de la pasión, por favor,
Dejémonos escapar!
¿Y qué me das por no saber
lo prohibitivo en tus martirios?
¿Y qué me das por conocer
los caprichos del placer?
Fuente: musica.com
Letra añadida por BillyNelson